La tos seca y persistente es uno de los síntomas del covid-19 y que puede perdurar aun después de que la persona haya sido dada de alta. ¿Qué hacer en estos casos? Antes que nada, consultar al médico y no automedicarse.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) en Estados Unidos, publican que los medicamentos de venta libre para la tos, que se compran en las farmacias, pueden ayudar en el alivio de este síntoma persistente. También la Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que algunos remedios occidentales, tradicionales o caseros, pueden proporcionar bienestar durante o después del cuadro de covid.
Pero también se puede aliviar la tos sin necesidad de recurrir a remedios, aunque sean de venta libre. Un consejo es tomar muchos líquidos, según la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA). Además, de proporcionar alivio para la tos, la ingesta de líquidos ayudará a evitar que los pacientes se deshidraten en caso de que tengan una fiebre alta, mientras cursan la infección de coronavirus.
Por otro lado, como la tos persistente y seca puede ser bastante irritante para la garganta, en los adultos, se pueden usar pastillas para la tos de venta libre o caramelos duros que ayudan a calmar el dolor y reducir la necesidad de toser, siempre según los CDC. También se pueden tomar jarabes recetados por un médico para ayudar a expectorar -en caso de que haya mucosidad- o bien para calmar la tos seca una vez que se superó la enfermedad.
Del mismo modo, se puede consultar la conveniencia o no de usar un humidificador, ya que para la tos seca, la humedad puede ayudar a respirar mejor. En general, los humidificadores son útiles para otras enfermedades respiratorias, resfríos y gripe, la congestión nasal o para disolver el moco y poder expectorar.
Qué hacer con la tos en los niños
La FDA estadounidense no aconseja el uso de medicamentos de venta libre para los síntomas de la tos en niños menores de dos años. Por tal motivo, se etiquetan productos de farmacia con la aclaración de que no deben ser administrados a niños menores de cuatro años. De todos modos, siempre lo primero que hay que hacer es una consulta con el pediatra.
De hecho, los productos de venta libre pueden ser dañinos para los niños si toman: dosis con demasiada frecuencia, más de un producto que contiene el mismo medicamento, más de la cantidad recomendada o medicamentos destinados a adultos.
Las afecciones postcovid
Después de un cuadro de coronavirus, las personas pueden tener afecciones posteriores a la infección. Para esto, es aconsejable realizar un chequeo médico para evaluar la capacidad pulmonar y coronaria, entre otras.
Los CDC usan varios enfoques para estimar cuántas personas tienen afecciones posteriores al covid. Por ejemplo, algunos estudios buscan la presencia de afecciones posteriores con base en los síntomas mencionados por el paciente, mientras que en otros se recopilan los síntomas y afecciones que figuran en los registros médicos.
En otros, se pone la atención solo en personas que han sido hospitalizadas, mientras que hay otros grupos que incluye a personas que no han sido hospitalizadas.
Las estimaciones de la cantidad de personas que tienen afecciones postcovid pueden ser diferentes según de quiénes hayan sido incluidos en el estudio y de cómo y cuándo se recopiló la información para el estudio.
De todos modos, las estimaciones de la proporción de personas que tuvo COVID-19 y sigue teniendo afecciones posteriores al COVID-19 pueden variar:
- El 13,3 % al mes o mucho después de la infección
- El 2,5 % a los tres meses o más, según lo notificado por los pacientes
- Más del 30 % a los 6 meses entre pacientes que estuvieron hospitalizados