A raíz de un video del Mundial 86 que se viralizó en las redes sociales y en el que se puede ver el contexto previo al gol de Diego Maradona a los ingleses, Víctor Hugo narró en La Mañana dos emocionantes y desopilantes anécdotas que pintan por completo la extravagante personalidad de Carlos Salvador Bilardo.

"Es un hombre muy de bien. Una gran persona. Es fantástico ver lo bien que jugaban sus equipos y sin embargo se ha mentido e instalado que era un futbol ordinario y picapedrero", introdujo Víctor Hugo.

"Víctor Hugo, muchas gracias"

La primera anécdota ocurrió a los pocos minutos de que Argentina le ganara 3 a 2 a Alemania y se coronara campeona del mundo por segunda vez en su historia. "Cuando terminó el partido, yo empecé a nombrar en la transmisión distintos pueblos, ciudades y provincias donde se estaba festejando el triunfo de la Selección. De repente empiezo a escuchar una voz por el auricular, y no sabía de quién era", contó el conductor de AM750.

"Nosotros habíamos dejado un equipo dentro del vestuario, que utilizaba uno de los periodistas del equipo. Para facilitarnos las cosas, Bilardo sabía dónde estaba el equipo y sabía abrir el micrófono. Era él el que me estaba llamando. Me dijo: 'Víctor Hugo, muchas gracias por todo', y cerró el micrófono".

El alivio de Bilardo

La segunda anécdota ocurrió el mismo día. Cuando terminó la transmisión, Víctor Hugo salió a caminar por Ciudad de México y se cruzó con Bilardo. El periodista recordó que, cuando lo vio, felicitó al entrenador y se dieron un abrazo. Ambos tenían una "muy buena relación" porque Víctor Hugo fue uno de los pocos periodistas que defendían a la Selección del 86. "Cuando Bilardo me abraza me dice 'vos sabes qué alivio es no tener que jugar las eliminatorias´", contó Víctor Hugo. Argentina, por haber sido campeona, no tenía que disputar las clasificaciones para jugar el mundial del 1990.

"Tenés que estar sonado. En vez de festejar él ya estaba pensando en lo que iba a venir. Así fue como jugó la final del siguiente campeonato del mundo", remató Víctor Hugo.