El arquero de Racing Gabriel Arias declaró en la mañana del lunes en la comisaría de Vicente López por una falta contravencional que le labraron por realizarle gestos obscenos a los hinchas de Platense tras el triunfo del conjunto de Avellaneda por 1 a 0.

Arias, quien fue expulsado por su descontrolada reacción cuando terminó el encuentro, concurrió a la dependencia policial y ratificó que fue víctima de insultos xenófobos por parte de los simpatizantes del elenco de Vicente López, por lo que la institución podría recibir una sanción en su estadio.

Apenas el árbitro Facundo Tello pitó el final del encuentro, el arquero de Racing se dio vuelta para mirar a la tribuna que estaba detrás de su arco con los hinchas locales y les hizo un gesto obsceno con las manos que desató la reacción de los aficionados. Arias estaba fuera de sí y continuó con los gestos, mientras algunos de sus compañeros e integrantes del cuerpo técnico intentaban persuadirlo para que se calmara.

Ya más tranquilo en los vestuarios, el arquero de la selección chilena explicó lo que había sucedido y le pidió disculpas al resto de los hinchas de Platense. "Es muy difícil creer en esta sociedad que se tomen el trabajo de buscar los nombres de los familiares de un jugador y te insulten casi cien minutos. Se pasan los límites, no me lo banqué, exploté contra esas cuatro personas. No es nada contra la gente de Platense, les pido disculpas. Es para esas personas que insultaron constantemente a mi familia", comentó el nacido en Neuquén.

En ese sentido, añadió que se vio desbordado por los insultos que había recibido. "Estamos en una sociedad que busca lastimar, cosa que no están bien. Disculpas a mis compañeros y a la gente de Platense. No fue correcto, me hago cargo, pero los que se agarraron conmigo no saben lo que me tocó pasar, llegó un momento que no lo aguanté. Fueron cosas muy hirientes, me quisieron lastimar y no está bueno", destacó el arquero, que ahora deberá aguardar también la sanción deportiva que le aplicará el Tribunal de Disciplina de la AFA por la expulsión y por los gestos obscenos.

El entrenador Fernando Gago, por su parte, señaló que habló especialmente con Arias para evitar situaciones similares en el futuro. "No debe reaccionar así, hablé corto con él en el vestuario. Es una equivocación que tuvo, las emociones no deben ser así. Esto no puede suceder. Hay situaciones que sobrepasan y Gaby se equivocó", remarcó el técnico de Racing.

A su vez, Arias utilizó las redes sociales para volver a pedir disculpas y manifestó: "Ser una persona pública implica la obligación de mantener una línea de conducta que no logré sostener esta vez. Cualquiera puede fallar y esta vez me tocó a mí".