El sureste de Estados Unidos, incluidos Carolina del Sur y Carolina del Norte, recibieron a Ian este viernes, que se perfila como el huracán más devastador de la historia de Florida. En este estado los daños económicos son incalculables y continúa la incertidumbre sobre el número total de muertos.

El más reciente boletín del Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) detalla que Ian tocó tierra en Georgetown, Carolina del Sur, con vientos máximos sostenidos de 85 millas por hora (140 km/h), arrastrando una marejada ciclónica de alto riesgo y vientos peligrosos.

El NHC también emitió una alerta de huracán para toda la costa de Carolina del Sur, así como para partes de Georgia y Carolina del Norte. Desde el organismo esperan que Ian se debilite rápidamente y se disipe "cerca de la frontera entre Carolina del Norte y Virginia el sábado por la noche", aseguraron.

"El peligro es real" advirtió por su parte el gobernador de Carolina del Sur, Henry McMaster, antes de que el huracán tocara tierra el viernes por la tarde en ese estado, donde ya hay más de 214.000 abonados sin servicio eléctrico.

El después de Ian en Florida

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, aclaró este viernes que solo había un muerto confirmado y argumentó que es muy pronto para saber el total porque no hay acceso a algunos centros sanitarios. Pero funcionarios locales confirmaron la muerte de al menos 12 personas, la mayoría en el condado de Charlotte.

El gobernador además describió el área costera de Fort Myers como "zona cero", pero destacó que también hay "efectos tierra adentro".

Muchas personas lograron abandonar sus hogares, pero al menos 20.000 optaron por quedarse, dijo DeSantis. Además, la Guardia Costera informó del hallazgo de un cadáver de una veintena de balseros que venían de Cuba y naufragaron durante el huracán en las costas de Florida. Otros nueve han sido rescatados con vida.

Dos días después de tocar tierra el ciclón en Florida, los socorristas y soldados trabajan arduamente para restablecer la normalidad tras los destrozos que dejó Ian en la península, pero el rescate se complica por la incomunicación y el hecho de que 1,7 millones de usuarios continúan sin luz.

Para la evaluación de daños utilizan un equipo de drones y rescate a cargo de unos 7.000 soldados de la Guardia Nacional de Florida y otros estados. Además, aterrizan helicópteros para operaciones de rescate en islas que quedaron totalmente incomunicadas. Un oficial de la Guardia Costera de Estados Unidos indicó que los helicópteros estaban evacuando gente refugiada en los techos de sus casas.

La situación en las zonas afectadas es una incógnita. Las imágenes de televisión muestran sobrevivientes que fueron rescatados caminando entre las inundaciones, en medio de escombros de casas, árboles, postes y embarcaciones.

En tanto, hay miles de personas que continúan atrapadas en sus casas por las inundaciones y algunas carreteras están intransitables, en especial en la costa oeste.

El condado Lee, en la costa oeste, fue uno de los más afectados por el ciclón categoría 4. Allí, los vientos huracanados provocaron que casas prefabricadas a lo largo de la localidad de Fort Myers se derrumbaran, por lo que se mantienen abiertos aún 15 refugios que fueron instalados previo a la llegada del huracán para aquellos que se quedaron sin techo.

Entre tanto, el presidente de EE.UU., Joe Biden, admitió este viernes que la reconstrucción puede llevar años y aprobó una declaración de zona de desastre para nueve condados de Florida afectados por el huracán Ian que permitirá aumentar la ayuda federal para paliar los daños.

La calificadora Fitch Ratings calculó en una primera evaluación realizada a partir de las propiedades aseguradas, que los daños de Ian en Florida pueden fluctuar entre los 25.000 y los 40.000 millones de dólares. El huracán Katrina que devastó Nueva Orleans en 2005 originó daños por 65.000 millones de dólares.

CUBA

En Cuba el servicio de internet se vio afectado por cerca de siete horas este viernes. Los ciudadanos no tenían acceso a datos en los teléfonos móviles y continuaban con un 40 por ciento de los usuarios sin luz.

Los cubanos empezaron a desesperarse por los prolongados apagones que ponen en peligro los escasos alimentos que atesoran en sus congeladores y que también impiden el bombeo de agua desde las fuentes que abastecen a la capital. Por lo cual salieron durante la madrugada del viernes a protestar a la calle.

El primer secretario del gobernante Partido Comunista en La Habana, Luis Antonio Torres, dijo que: "protestar es un derecho, pero es un derecho cuando los responsables del Estado y del gobierno están dejando de hacer lo que les compete".

Mientras dos aviones de la Fuerza Aérea Mexicana fueron enviados a la capital cubana con cables y material eléctrico. Estos son parte de la ayuda ofrecida por el presidente Andrés Manuel López Obrador, cuyo traslado se debe realizar en 10 vuelos, informó la televisión local.

17 migrantes desaparecidos

Diecisiete migrantes siguen desaparecidos luego de que el bote en que viajaban se hundiera el miércoles cerca del archipiélago de los Cayos, en el extremo sur de Florida.

De las 27 personas a bordo, una fue hallada muerta y otras nueve fueron rescatadas, dijo la Guardia Costera. Entre ellos se encontraban cuatro cubanos que nadaron hasta la orilla en los Cayos.

Según un análisis preliminar de científicos estadounidenses, el calentamiento global aumentó las lluvias extremas, como las que desató Ian, en más del 10%.

Los expertos aseguran que el cambio climático inducido por la actividad humana está provocando eventos meteorológicos más severos en todo el mundo.