El clamor de la comunidad de Acebal, expresado la semana pasada ante los medios de la región para hacer visible la crisis de la industria del calzado, generó un encuentro ayer en Santa Fe entre representantes de los tres niveles de Estado y de la Cámara que nuclea a las fábricas del sector amenazado por la retracción del consumo y la apertura indiscriminada de las importaciones. "Presentamos un petitorio y cabe la posibilidad de conseguir subsidios a nivel salarial y también puede  haber fondos de la provincia como paliativo para aguantar unos meses hasta ver qué sucede con la próxima temporada, no está perdida del todo pero no somos muy optimistas con lo que puede llegar a pasar", señalaron los empresarios acebalenses al término de la reunión a la que asistieron el ministro de la Producción, Luis Contigiani, y el diputado nacional por el PRO, José Núñez. En ese marco, habló uno de los empresarios convocados. Luis Schivalocchi (Del Sauce Calzados) dijo que "la problemática se inició dada la crisis que se viene acentuando cada vez más". "Se inició en la comuna con una movilización y tratando de llegar a las autoridades provinciales y nacionales para ver si podemos llegar a tener una ayuda o algún paliativo para seguir adelante fundamentalmente para defender la fuente de trabajo ya que un 60% de la población se nutre de esta actividad". Los fabricantes señalaron que el descenso de la actividad obedece a la importación, el enfriamiento del consumo y el contrabando. "El mercado de las provincias limítrofes lo hemos perdido, como ya ocurrió con Misiones, Jujuy, Mendoza o Santa Cruz", aseveraron.

Contigiani, por su parte, dijo que la situación del cluster del calzado es desesperante y confirmó que avanzarán en las negociaciones con el intendente de Acebal y parte de los empresarios de esa localidad para poner en marcha medidas que permitan paliar la crisis del sector.