Juntos por el Cambio se opone al tratamiento del juicio político a la Corte Suprema de Justicia, pero, en simultáneo, intenta impedir que se avance con el resto de los proyectos propuestos por el presidente de la Nación para las sesiones extraordinarias. De ese modo, tratan de bloquear el funcionamiento del Parlamento.

En ese escenario, quienes formamos parte del bloque de diputados y diputadas nacionales del Frente de Todos emitimos un comunicado por el cual solicitamos formalmente “que las y los presidentes de comisiones de Juntos por el Cambio —involucrados en el tratamiento de los temas de extraordinarias— convoquen a sus respectivas comisiones para debatir todos los puntos que sean necesarios, a fin de arribar a los dictámenes de cada tema”. El comunicado agrega que “convocamos a todos los bloques de esta Honorable Cámara a tener, como otras tantas veces, una actitud positiva para avanzar en el temario propuesto, dando los debates que haya que dar en cada comisión y en el recinto”. Es decir: un llamado a que abandonen el bloqueo del Congreso y comience a trabajar. Porque, con la excusa de no tratar el juicio político a la Corte, traban la totalidad del funcionamiento parlamentario. Eso se llama chantaje.

Así, no sólo dificultan la gestión gubernamental, también y fundamentalmente imposibilitan la aprobación de leyes que amplían derechos. Los que se perjudican son distintos sectores de la sociedad que no alcanzan los beneficios que obtendrían si se sancionaran las leyes que Juntos por el Cambio se niega a tratar.

Entre otros, impiden el tratamiento del proyecto de ley de regularización de aportes previsionales, que busca resolver la situación de desamparo de alrededor de 800 mil argentinos y argentinas que han llegado a la edad de jubilarse, pero no cuentan con los aportes suficientes para hacerlo.

Bloquean además los proyectos de ley para crear nuevas universidades en distintas localidades del país. Se trata de las Universidades Nacionales del Delta, Saladillo, Pilar, Cuenca del Salado, Cañuelas, Ezeiza, Río Tercero, Madres de Plaza de Mayo y Paraná.

De igual manera obstruyen las iniciativas para apoyar a personas con hijos o hijas en gestación con síndrome de Down; la digitalización de las historias clínicas en el orden nacional; el impulso al Sistema Nacional de Residencias del Equipo de Salud y la creación del Parque Nacional y de la Reserva Nacional Laguna El Palmar.

También el proyecto de establecimiento de un régimen previsional diferencial para los trabajadores que se desempeñen o se hayan desempeñado como combatientes de incendios forestales o rurales en organismos nacionales o provinciales de cajas transferidas; la aprobación del Plan Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación 2030; el proyecto de ley de Abordaje Integral de la Violencia Institucional en Seguridad y Servicios Penitenciarios y el proyecto de ley por el cual se establece un régimen simplificado para pequeños contribuyentes tecnológicos (monotech).

Además, el proyecto de ley tendiente a introducir modificaciones en la legislación vigente, vinculada a la prevención y represión del lavado de activos, la financiación del terrorismo y el financiamiento de la proliferación de armas de destrucción masiva; el proyecto de ley que prevé modificar la Ley del Consejo de la Magistratura; el régimen de fomento al desarrollo agroindustrial; la denominada Ley Lucio, para prevenir el maltrato infantil, y el proyecto de ley para ampliar el número de integrantes de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Lejos del argumento de Juntos por el Cambio de que se trata de temas “que no interesan a la gente”, todos tienen gran interés social. Muchos de ellos ya tienen dictamen de comisión para ser votados en el recinto. Algunos ya vienen aprobados por el Senado, por lo que, si la Cámara de Diputados los tratara y también los aprobara, se convertirían en ley.

No es que el Parlamento no funcione porque ninguno de sus miembros quiere que funcione. No funciona porque Juntos por el Cambio lo impide. Por el contrario, nosotros queremos avanzar con el tratamiento de todos estos proyectos. Pero no podemos hacerlo solos. De allí el llamado a los legisladores opositores para que terminen con el bloqueo parlamentario.

Varios de estos temas que hoy se niegan a tratar en sesiones extraordinarias ya estaban en el orden del día de la reunión en la que no dieron quórum y que terminó con insultos a la Presidenta de la Cámara, Cecilia Moreau. Más aún: cuando se trataron algunas de estas iniciativas en la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados, los representantes de Juntos por el Cambio expresaron posiciones sumamente críticas. Por ejemplo, cuando se trató el proyecto de ley de regularización de aportes previsionales, por el cual personas que no tienen los aportes suficientes para jubilarse obtienen el beneficio y luego se les va descontando de éste los aportes faltantes, hemos escuchado a legisladores y legisladoras preguntarse por qué toda la sociedad debía hacerse cargo de lo que algunas personas “no quisieron” pagar en su momento. También se opusieron a la creación de nuevas universidades con el argumento de que el problema está en el nivel secundario y que poner el esfuerzo en el universitario es un gasto inútil.

En el temario figura el juicio político a la Corte Suprema de Justicia que se ha desempeñado con una parcialidad manifiesta incumpliendo con la Constitución Nacional. Uno de sus fallos favorece a la Ciudad de Buenos Aires elevando el monto de las transferencias de la administración central hacia ese distrito.

En el hipotético caso de que hubiera que cumplir con ese fallo sería necesario que el Parlamento modifique el Presupuesto. Ello se puede hacer reasignando partidas de gastos o aumentando ingresos. Una vez que el Poder Ejecutivo envíe al Congreso el proyecto con esos cambios, sería necesario tratar esas modificaciones para posteriormente votarlas.

Por lo cual, el desbloqueo del funcionamiento del Parlamento es también necesario para resolver esta cuestión.

Los integrantes del Bloque de diputados y diputadas del Frente de Todos estamos trabajando en todas las comisiones para el tratamiento del temario de las sesiones extraordinarias. Y convocamos a los diputados y diputadas de Juntos por el Cambio a que hagan lo mismo. Se trata de trabajar para mejorar la vida de los argentinos y las argentinas.

* Diputado nacional por el Frente de Todos y presidente del Partido Solidario.