Varias cuadras de acampe desde la puerta del santuario de San Cayetano, en el barrio porteño de Liniers, daban el marco para las estimaciones que irán transformándose en números concretos durante el día de hoy, fecha del santo del trabajo. Las estimaciones de la Iglesia rondaban anoche entre 800 mil y un millón y medio de personas que se acercaron al templo, en un contexto social signado por los altos índices de desocupación y pobreza en el país. Este año, San Cayetano recibirá además de los tradicionales pedidos de trabajo, las convocatorias realizadas por organizaciones sociales políticas y sindicales, que acompañarán a los fieles desde las inmediaciones del santuario hasta Plaza de Mayo, para reclamar al gobierno “la sanción inmediata de la Ley de Emergencia Alimentaria”.

Ayer, a lo largo de dos cuadras, grupos de familias en su mayoría de diferentes localidades del conurbano bonaerense se preparaban en las inmediaciones de la iglesia de Liniers con carpas, mantas, mate y facturas para celebrar esta mañana el día de San Cayetano, patrono del pan y del trabajo.

La expresión de fe popular, que se constituye en un virtual termómetro del desempleo, llevará por lema “San Cayetano, amigo de los trabajadores, danos paz, justicia e igualdad” y la misa central será presidida a las 11 por el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Poli.

En twitter, mientras tanto, rebotaban comentarios del estilo “Ciertos milagros no son viables para San Cayetano”, del Grupo de Curas OPP.

El sacerdote Alejandro Vignale, párroco del templo de Liniers, estimaba ayer que “miles de peregrinos vendrán a pedir no perder el empleo, fuentes laborales, trabajo digno y un salario justo. La expectativa es grande, esperamos que mucha gente venga a pedirle al santo pan y trabajo, que es esencial”, sostuvo. El sacerdote estimó que durante el día pasarán entre “800 mil y un millón y medio” de personas.

La desocupación llegó a 9,2 por ciento en el primer trimestre de 2017 y se convirtió en el registro más elevado en una década para ese momento del año. La situación del mercado de trabajo relevada por el Indec colisiona con el diagnóstico de reactivación laboral que el Gobierno promociona desde enero.

Por otro lado, organizaciones sociales, políticas y sindicales marcharán desde las inmediaciones del santuario hasta la Plaza de Mayo para reclamar al Gobierno “la sanción inmediata de la Ley de Emergencia Alimentaria”. Los manifestantes se concentrarán a las 8.30 en la intersección de las avenidas General Paz y Rivadavia y desde allí se movilizarán a Plaza de Mayo con la consigna “Pan, paz, tierra, techo y trabajo”.

El triunviro de la CGT, Juan Carlos Schmid y el titular de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), Pablo Micheli, participaron junto a la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP); Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa (CCC), del anuncio de la movilización que se realizará hoy. Schmid dijo que venían a “brindar el apoyo de la CGT a esta movilización que se realiza todos los años, y porque la situación social y económica vive un cuadro complejo y difícil”. Por su parte, El titular de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, consideró que la fecha es el aglutinante “de una convocatoria a una gran protesta nacional con movilización”.