En una gran muestra de creatividad y compromiso, Zoe Apicella, de tan solo ocho años, desarrolló un videojuego educativo centrado en la prevención del acoso escolar. Con este proyecto, Zoe se convirtió en una de las ganadoras de las Olimpiadas Internacionales de Tecnología para niños y adolescentes, organizadas por la Fundación NTT DATA.
Esta competición no solo destaca la importancia de las habilidades tecnológicas entre los jóvenes, sino que también aborda desafíos reales en la sociedad.
Según la ONG Bullying sin Fronteras, Argentina tiene una incidencia significativa de bullying y ciberbullying que afecta al 70% de los niños y adolescentes en entornos escolares. El videojuego de Zoe aborda esta problemática al narrar la historia de Ferdi, un niño nuevo en la escuela que se siente excluido. Para evitarlo, los jugadores deben tomar decisiones en diversas situaciones para ayudar a Ferdi a prevenir el acoso, promoviendo la empatía y la inclusión.
La competencia reunió a más de 1.400 participantes, de entre siete y 16 años, provenientes de 10 países diferentes, quienes tuvieron que desarrollar sus destrezas digitales a través del juego y de retos para solucionar problemas de su entorno. De esta forma, se buscó despertar en ellos el interés por la programación de manera divertida y práctica. A lo largo de todo el proceso, los participantes contaron con el apoyo de entrenadores que, como en cualquier olimpiada, los guiaron para llegar al reto final.
Vanesa, la mamá de Zoe, contó que se enteraron de la competencia gracias a Patricia, que trabaja en la empresa organizadora. “Ella nos preguntó si Zoe estaría interesada en participar y aprender sobre Scratch. Me pareció una oportunidad valiosa para que aprendiera, explorara y aprovechara las clases grabadas durante las vacaciones. A ella le encanta aprender, así que decidimos inscribirla", explicó.
Pablo Pereira, CEO de NTT Data Argentina, explicó que esta iniciativa "destaca el compromiso de la empresa con la idea de que la tecnología debe apuntar hacia problemas reales para generar un impacto positivo y crear conciencia sobre cuestiones críticas, como el bullying en las escuelas".
Por su parte, la propia Zoe compartió cómo fue su experiencia desarrollando el videojuego: “Al principio tenía algunas dudas, pero a medida que profundizaba en el tema, pude investigar cada aspecto en detalle, y los videos fueron de gran ayuda. Me llevó aproximadamente cinco días crear el videojuego y dar forma a la idea. Lo disfruté mucho”. Cuando se le consultó acerca de que le gustaría hacer cuando crezca, Zoe expresó: "Me gustaría seguir creando videojuegos y programando, y sobre todo aprender cosas nuevas".
Para conocer el juego, hacer click acá.
