El analista político Gustavo Marangoni aseguró este viernes por AM750 que la división en Juntos por el Cambio se veía venir desde antes de las PASO y advirtió que “las fuerzas que queden derrotadas” en las elecciones de este año “están destinadas a separarse”.

En esa línea, explicó que esto se debe a que nuestro país vive “el agotamiento del régimen político que parió la crisis del 2001 y el proceso de Néstor Kirchner del 2003”. Y recordó que “primero hubo una coalición con eje en el peronismo y luego la consecuencia del armado de Cambiemos”.

“Eso está llegando a su fin, como está llegando a su agotamiento un sistema sostenido en la alta inflación y la crisis fiscal. En virtud de esto podemos comprender los episodios”, señaló Marangoni, a menos de un mes del balotaje que enfrentará Sergio Massa y Javier Milei. 

En este punto, el analista aseguró que “no suena muy difícil comprender por qué los radicales y la Coalición Cívica están discutiendo” su posición en JxC. “Es como esas parejas que formalizan la separación pero todo el mundo lo sabía. Sabíamos que comprarían techo, pero no cama”, continuó.

Para Marangoni esta crisis en la oposición se veía venir porque Mauricio Macri "ya había tirado indirectas directas en su evocación de su transformación total”, algo que “lo emparejaba con Milei”.

En ese sentido, contextualizó: “Ahora esta coalición nueva, o este acuerdo nuevo, entre Macri, Bullrich y Milei, tiene dificultades, porque LLA tuvo una performance por abajo de lo que pensaba. Hay que ver si (Milei) se deja manejar por Macri, que puede ofrecer toda su experiencia y recursos materiales y humanos”.

La economía poselectoral

Por otro lado, el también expresidente del Banco Provincia señaló que el triunfo de Massa del domingo pasado no es un dato menor, ya que alejó la posibilidad de llegar a un balotaje con una crisis económica agudizada.

“Massa cuenta con un servicio involuntario que le dio Milei, que es aligerar las presiones y el estrés cambiario. Cuando Milei, antes de la primera vuelta, era un presidenciable con su bandera dolarizadora, le agregaba un factor de peligro a una economía exhausta de dólares en el Banco Central con todas las presiones”, sostuvo.

Y finalizó: “Era más probable que el dólar siguiera arriba de los $ 1200. Hoy esa posibilidad está lejos porque la dolarización no se ve como posible, aún ahora, con su coalición con el PRO y la incorporación de economistas que conocemos”.