En la primera jornada hábil tras la victoria del candidato ultraliberal Javier Milei, el dólar blue dio un salto del 13 por ciento, es decir de 125 pesos, y cerró en 1075 pesos por unidad. Los dólares financieros también registraron aumentos. Principalmente la cotización del MEP que se incrementó más del 6 por ciento en la jornada y cerró en 930 pesos por unidad.

El mercado especula que, una vez que asuma Milei, se irán desarmando -con una secuencia todavía desconocida- los controles cambiarios y habrá un salto importante del tipo de cambio oficial, lo cual acelerará los precios, y provocará nuevas presiones de tipo de cambio.

El equipo económico saliente aseguró que no realizará correcciones bruscas del dólar oficial en lo que resta del mandato y para incrementar el ritmo de oferta de divisas aumentó de 30 a 50 por ciento el incentivo para que los exportadores liquiden al contado con liquidación. El esquema de promociones a las exportaciones vencía el viernes pasado y se prorrogó hasta el 10 de diciembre. El Banco Central cerró la primera rueda de la semana sin  intervenciones en el mercado de cambios.

Uno de los interrogantes que tenían los inversores es qué iba a pasar este martes con la colocación de deuda en pesos del Tesoro, la cual se llevó adelante sin inconvenientes para el Palacio de Hacienda. Se capturaron 1,76 billones de pesos y se cubrieron todos los vencimientos. El financiamiento neto terminó en 233 mil millones de pesos. 

Esto último no implica que la deuda en pesos atraviese un momento de holgura ni que haya pasado el temor al impacto de una dolarización. Los bonos ajustados por inflación como el TX26 anotaron bajas de casi 4 por ciento, en la medida que los inversores consideran que estos títulos resultarían castigados fuertemente con un canje para pasarlos a moneda extranjera.

En principio, porque ahora cotizan cerca de la paridad y, si son transformados a nuevos bonos en moneda extranjera, los inversores estiman que tendrán un precio más cercano al 30 por ciento de paridad, es decir el valor al que se están operando actualmente los Globales y Bonares.

Por el momento, no hay precisiones de cómo se trataría a la deuda en pesos en el caso que se decida efectivamente iniciar un proceso de dolarización. Pero las primeras señales muestran que son activos que empiezan a tener menos demanda. Se trata de un contraste importante respecto de la primera reacción que hubo con las acciones. El lunes volaron en Wall Street, y este martes -con la reapertura de la bolsa porteña luego del feriado- las firmas del Merval treparon hasta casi 23 por ciento medidas en pesos.

La petrolera YPF fue una de las que se destacó con un salto diario de alrededor del 39 por ciento. El presidente electo reafirmó a inicio de esta semana que tiene la intención de privatizar la empresa como en los noventa.

Los títulos en moneda extranjera fueron otros activos que registraron una ola de compras. Por ejemplo, el Global con vencimiento en 2035 marcó un aumento de más del 11 por ciento, mientras que el Bonar con vencimiento en 2030 registró un salto del 12,8 por ciento. Son cifras que muestran la euforia que se generó tras las elecciones y las declaraciones de Milei de avanzar en un plan de privatización, apertura y ajuste del sector público.

Volviendo a la colocación de deuda en pesos de la jornada, el Palacio de Hacienda difundió un comunicado asegurando que se concretó la primera emisión de un bono temático sostenible soberano. “Esto constituye un hito relevante en la implementación de la Estrategia de Finanzas Sostenibles”, aseguró el Ministerio de Economía. Los fondos conseguidos se aplicaran en partes iguales para financiar el programa de Desarrollo de Infraestructura Hidráulica y el programa Conectar Igualdad.

En los detalles de la licitación de deuda en pesos, se mencionó que era la colocación más importante del mes, que se buscaba financiamiento por 1,52 billones de peso y que se consiguieron 1,76 billones de pesos. El 58 por ciento del financiamiento obtenido correspondió a instrumentos con vencimientos en 2024 mientras que, el 42 por ciento correspondió a instrumentos con vencimiento en 2025.