En Santiago y con ambos combinados dirigidos por técnicos argentinos, Chile se impuso 2-1 a Ecuador en un final electrizante. Eduardo Vargas abrió el marcador para el local, a siete del epílogo el ingresado Romario Ibarra ponía el empate parcial, que duró poco porque un minuto después Alexis Sánchez le daba al equipo de Juan Antonio Pizzi un triunfo trabajoso y sufrido, pero que merecía largamente. Hasta el momento, la Roja quedó en zona de clasificación directa a la cita mundialista. El conjunto del debutante Jorge Célico, quien reemplazó su compatriota Gustavo Quinteros, ya se despidió de Rusia 2018.  

No había muchas opciones para este partido, porque ambos debían ganar si querían aspirar a una plaza mundialista. Chile venía dos derrotas seguidas, pero fue beneficiado con dos puntos ganados ante los bolivianos por mala inclusión de un jugador. No había buen ambiente con Pizzi, que marginó del plantel al volante Marcelo Díaz, en una decisión que cayó mal entre los hinchas trasandinos. Aunque peor escenario traía Ecuador, que acumulaba cuatro reveses seguidos. 

Así, el actual campeón de América, empujado por su gente, entró mejor parado en cancha. Una jugada por izquierda de Sánchez pareció que era controlada por Valencia, pero el defensor perdió la pelota y, tras una serie de rebotes, Vargas perforó la red. Con la ventaja consumada, en el complemento la Roja continuó con el control del juego, pero Ibarra empató y paralizó corazones chilenos. Y en la jugada siguiente, tras otro error infantil de la defensa ecuatoriana, Sánchez puso el 2-1 definitivo que daba tranquilidad al otro lado de la Cordillera.