El exsecretario de Culto de la Nación, Guillermo Oliveri, recordó el momento en el que Francisco fue ungido como Papa y aseguró que su legado y los cambios que le imprimió a la Iglesia Católica son “irreversibles”. Además, Oliveri contó detalles de su relación con el Papa Francisco cuando aún era el cardenal Jorge Mario Bergoglio.

Conocí a Bergoglio Cardenal siendo yo legislador porteño. En algún momento presidí la comisión de vivienda y me encontré con él, me hizo algunas sugerencias. Una de ellas fue hacer las reuniones con los delegados de las villas en las mismas villas, en la que participaron sacerdotes villeros. Ahí empezó la relación sin pensar que cuando asumió Nestor Kirchner se iba a decidir que yo asumiera un rol en la Secretaria de Culto que persistió hasta el último momento de Cristina”, rememoró.

Asimismo, contó el momento en que Bergolgio fue ungido como Papa por la Santa Sede y la decisión de la entonces presidenta Cristina Kirchner. “Estaba reunido con mi equipo viendo la fumata y el Cardenal francés anunció a Bergoglio. Dos minutos después la presidenta Cristina me dice que Bergoglio era el Papa y me dijo que nos íbamos a Roma”, dijo.

Según el exsecretario de Culto, la relación de Francisco y Cristina Kirchner “siempre fue buena” y hubo “mucho diálogo” entre ellos.

“Esa relación que era muy positiva siguió y me consta que Cristina lo ha invitado formalmente (a venir a Argentina). Hubo una posibilidad que pudo haber sido el año pasado, el 2024, pero quedaba a disposición de él. Tenía armado viajes a Oriente y finalmente no se concretó”, lamentó.

Por último, reveló cuáles fueron los temas que se tocaron en su última charla con el Papa y qué pensaba acerca de su legado.

“La última charla que tuve con él fue a finales de 2024. Hablamos de su legado, entre otras cosas. Estaba muy preocupado por la guerra de Ucrania. Había hecho una serie de jugadas que fue ir renovando, además de la general que le imprimió a la Iglesia. Puede que haya cambios, no sustanciales, pero el proceso que él inició es irreversible. Hay cambios que imprimió en el Vaticano y en toda la Iglesia, aunque ha tenido resistencia”, cerró.