El conflicto gremial al interior de Georgalos sumó esta semana un nuevo episodio. Tras el despido de cinco trabajadores por participar de una medida de fuerza, los empleados realizaron una manifestación en la Panamericana para exigir las reincorporaciones.
Maximiliano Montero, uno de los despedidos, contó por la 750 que el conflicto comenzó cuando los trabajadores se negaron a aceptar la reducción de personal. “La empresa quería aumentar la productividad y reducir el personal. Ante esa situación intervino el sindicato y se paró la línea”, explicó. Según dijo, tras tres días de paro que se levantaron por una audiencia, los despidos se concretaron al día siguiente.
Montero aseguró que la decisión de Georgalos —fabricante de alfajores, turrones de maní, cacao en polvo, chicles, barras de cereal, chupetines, gomitas, y postres de maní, así como el famoso Mantecol—, fue arbitraria y apuntó a una política de persecución.
“Dicen que fuimos los organizadores del paro”, afirmó, y advirtió que “nos están aplicando la Ley Bases a nosotros, como si no tuviéramos derecho a huelga”. Reclamó que, como trabajadores sindicalizados, la empresa debe acatar los marcos legales vigentes.
Además, denunció la inacción del sindicato. “El propio secretario general, Héctor Daer, dijo que iba a apoyarnos, que la empresa estaba en la ilegalidad y que debía acatar la conciliación obligatoria. Eso lo dijo hace diez días. Pero desde entonces no hizo nada”, afirmó.
Montero trabaja desde hace más de 20 años en la empresa. “Tenemos 20 años de antigüedad. Trabajamos seis días a la semana, ocho horas por día”, remarcó, y dijo que la empresa apunta a quienes se organizan. “Echan a quienes más hablamos, a los que tratamos de hacer pensar a los compañeros”, sostuvo. También reclamó que el gremio “siga exigiendo la reincorporación”.