La periodista de Página/12 Melisa Molina, expulsada de manera violenta de La Derecha Fest, el evento libertario encabezado por el presidente Javier Milei, contó la trastienda de la violenta situación que vivió mientras trabajaba. "Fue un episodio horrible", relató.

Molina, periodista de la sección Política de este diario, aseguró que nunca le había sucedido un episodio similar. “Fue horrible. Nunca me pasó algo así. Era un evento privado y me terminó sacando el Gobierno”, afirmó en declaraciones a la 750.

La periodista, también columnista de la 750, explicó que en un comienzo todo transcurrió como en cualquier evento político. Pudo cubrir el ingreso, le revisaron la mochila y los bolsillos, en un control exhaustivo de seguridad. 

Sin embargo, una vez adentro la situación cambió: "Me vió personal de Casa Militar, personas que trabajan en Casa Rosada que me conocen la cara porque yo cubro”. Aunque en un primer momento no tuvo problemas e incluso pudo cubrir los primeros paneles del festival —una exposición de pastores evangélicos y otra de Javier Negre, dueño del medio oficialista La Derecha Diario—, luego comenzaron los ataques. 

“En un momento se acerca gente de Casa Militar diciendo que desde Buenos Aires se había enterado que Página/12 estaba dentro del evento y que, antes de que sigan los siguientes oradores, tenía que salir”, contó.

La periodista consultó qué tenía de malo su presencia, ya que no estaba generando ningún tipo de molestia, ante lo que le respondieron que “no podía estar haciendo esa tarea ahí” y que se “tendría que haber registrado” como periodista, algo que efectivamente había hecho.

“Me dicen que me tenía que ir para que me den una pulsera. Me sacan del evento y me empiezan a hacer caminar –esto era un hotel a las afueras de la Ciudad de Córdoba– y me hacen ir cada vez más lejos”, contó sobre la situación, cada vez más tensa.

Y siguió el relato: “Les digo que no quiero seguir caminando con él, que no sé quién es. Me dice que es un contratado. Le digo que no quiero seguir caminando. Me dice 'vení', y me llevó a un terreno baldío. Me dice que me van a tomar los datos. Le pregunto qué datos. Y me dice que era para ver si estaba en la lista”.

La confusa situación siguió en un tono de apriete y extorsión: “Se fijan y me dan una pulsera. Mientras vuelvo, vienen dos personas de seguridad privada, me ponen una valla y me dejan sola. Les digo que me quiero ir. Y un señor viene, agarra dos billetes de 20 mil pesos, para cubrir el precio de la entrada y me los tira encima”.

En este punto, sostuvo la periodista, le dijeron que “Página/12 no podía estar adentro del evento cuando hablaba Javier Milei”. “Fue una situación horrible. No me dejaron entrar ni podía cubrirlo de manera remota, porque no pasaban el discurso”, dijo sobre una situación en la que la libertad de prensa parece ser tan solo una utopía.

Y añadió: “Es un evento privado –un contrato entre privados, yo había comprado mi entrada– me sacan y no me dejan contar lo que estaba pasando adentro. ¿Qué es lo tan grave que decía Milei que no podíamos escuchar?”.

Luego, finalizó: “Estuve en el vallado un buen tiempo y les dije que me quería ir. Estaba yo sola encerrada ahí. Una vez que empezó el discurso, varios portales empezaron a subir videos desde adentro del evento. No es que no había periodistas adentro”.

Seguí leyendo