El Gobierno buscó “limpiar” el balance de AySA previo a su privatización, mejorando los ingresos por ventas del servicio y achicando gastos sin realizar obras de saneamiento. Los tarifazos fueron una pieza clave en este esquema, y un comportamiento similar se exhibió durante la privatización en los años 90, con aumento real de las tarifas de un 88 por ciento.

Para lograr mejorar el resultado económ