“Quiero expresar a los que hemos sobrevivido –a pesar de todo– que la actual recuperación económica nos exige poner todo nuestro esfuerzo, nuestra creatividad y confianza en desarrollar todas las fuerzas productivas y culturales que potencialmente tenemos para erradicar la marginalidad, la pobreza y la desocupación. Nuestro lema es: sin industria no hay Nación.”

Con esta frase, Carlos Augusto Fort cerraba su exposición en la audiencia pública en la Legislatura porteña que derivó en la ley conocida como “Buenos Aires Ciudad Productiva”. Fort, Carlos Augusto Fort, fue durante toda su vida un empresario pyme que pensaba su fábrica como pensaba a la Nación.

Con dedicación y esfuerzo, el titular de La Delicia Felipe Fort S. A. supo llevar a su empresa industrial a la primera línea nacional e internacional en el rubro de chocolates y golosinas, transformándola en un orgullo de todos los que bregamos incansablemente a favor de la producción y el trabajo nacional.

En incontables reuniones se lo veía preocupado por hacer crecer su empresa y el sector industrial nacional. Como dirigente empresario (presidía la Cámara de Industriales de Productos Alimenticios), Fort, Carlos Augusto Fort, llevó la voz de todos sus pares ante las autoridades nacionales y locales, siempre en defensa del desarrollo productivo con inclusión social.

Su obsesión por ampliar su fábrica y mejorar los niveles de productividad y sustentabilidad ambiental hicieron a Fort, Carlos Augusto Fort, uno de los promotores del Foro para una Nueva Política Industrial, cuyo objetivo fue y sigue siendo que la ciudad de Buenos Aires recobre su pujanza industrial, aquella que la última dictadura militar le quitó a partir de su política explícita de desindustrialización, orientando así a la ciudad hacia un modelo de crecimiento para pocos, basado –principalmente– en la especulación inmobiliaria y en la eliminación de las pymes barriales como sustento del trabajo asalariado y de una mejor equidad territorial. Así el sur porteño comenzó su padecimiento a partir de fines de los ’70 gracias a ese proceso de desindustrialización, situación que aún hoy cuesta desactivar.

En vísperas del Bicentenario de nuestra nacionalidad, el Foro para una Nueva Política Industrial se siente en la obligación de rescatar la memoria de aquellos que como Fort, Carlos Augusto Fort, escribieron capítulos destacados de nuestra historia económica reciente y que esperamos seguir recordando con orgullo en estos tiempos donde la honestidad y la austeridad generalmente no son noticia.

Por el Foro para una Nueva Política Industrial Agustín Amicone, presidente Alejandro Robba, subsecretario de Coordinación Económica (Ministerio de Economía) y miembro del FoNPI

Oscar Leguizamón, vocal