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Se repite la historia. Como ocurrió en todas las series anteriores en Buenos Aires desde que Argentina recuperó su lugar en el Grupo Mundial, el mejor tenista rival no podrá estar presente. Ya les había sucedido a los australianos, a los croatas y a los alemanes, y ahora fue el turno de los rusos. Ayer se confirmó que la lesión en el tobillo derecho que sufrió Marat Safin el lunes le impedirá jugar al menos el single de esta tarde, y por ello fue reservado por el capitán ruso Shamil Tarpischev para disputar el doble de mañana junto a Yevgeny Kafelnikov, que lo reemplazará hoy. La otra sorpresa que tenían reservada los visitantes es la ausencia del Mikhail Youzhny, cuyo lugar será ocupado por Nikolay Davydenko. Eso es al menos lo que dejó en claro el sorteo efectuado ayer, aunque en el equipo argentino todavía desconfían de la movida ajedrecística de Rusia.
En el primer turno, a partir de las 10.30 (televisa TyC Sports), el número uno de Argentina, David Nalbandian se medirá ante Davydenko, mientras que a continuación jugará Gastón Gaudio ante Kafelnikov, reeditando el partido por las semifinales del año pasado en Moscú, una revancha que el argentino está esperando con ansiedad. Dos encuentros inesperados teniendo en cuenta lo que se especulaba. Por un lado, Safin había asegurado que iba a “jugar sí o sí”, sin importarle la lesión. Por otro, Kafelnikov remarcó en varias oportunidades que ya no disputaría singles de Copa Davis en polvo de ladrillo debido al desgaste que le ocasiona.
Sin embargo, luego de no haberse entrenado en los últimos dos días, la baja de Safin no resulta tan sorpresiva. La lógica indica que lo reservarán para el doble, y en caso de que la serie no esté definida el domingo, seguramente ocupará el lugar de Kafelnikov para medirse ante Nalbandian. En cambio, sí aparece llamativa la ausencia de Youzhny, que tiene mejores resultados sobre arcilla que Davydenko y además entre sus antecedentes figura el punto decisivo ante Francia que le dio el título de la Copa a su país el año pasado. Claro que la movida rusa genera cierta desconfianza en el conjunto argentino. “Hasta que no los vea en la cancha, tengo la sensación de que Safin puede jugar”, remarcó el capitán argentino, Gustavo Luza. Reglamentariamente, los rusos tienen tiempo hasta una hora antes del primer partido para cambiar a alguno de sus singlistas, siempre que se compruebe alguna molestia de los titulares.
Más allá de las especulaciones, lo concreto es que hasta ahora volvió a surtir efecto la maldición de Buenos Aires, esa que le impide jugar las series al mejor exponente de los visitantes. El primero en sufrirlo fue Australia en febrero de 2002 por la primera ronda del Grupo Mundial, cuando la varicela impidió que el número uno del mundo, Lleyton Hewitt, llegara al Buenos Aires Lawn Tennis para comandar a su equipo. En esa ocasión tampoco pudieron estar presentes Mark Philippoussis ni Patrick Rafter. Ya por cuartos de final, Croacia visitó Argentina, pero llegó disminuida en su potencial porque Goran Ivanisevic, con su hombro lastimado, apenas pudo disputar el dobles junto a Ivan Ljubicic.
Este año, la situación se repitió con Alemania. Si bien Tommy Haas estuvo en Buenos Aires, su presencia fue apenas simbólica y sólo sirvió para darle un poco de ánimo a sus compañeros. Además, el segundo singlista Nicolas Kiefer se quedó en su país también afectado por una lesión. Además de la serie entre Argentina y Rusia, también se enfrentarán España ante Croacia (de aquí saldrá el rival de semifinales), Suiza ante Francia y Suecia ante Australia.