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Eduardo Duhalde dijo ayer en Río Turbio que las medidas adoptadas para reactivar la explotación de la cuenca carbonífera santacruceña implican la puesta en marcha de “un nuevo modelo económico productivo” y, además, que “este mes se termina la depresión” que desde hace cuatro años afecta a la Argentina, para “comenzar a crecer”. Al encabezar junto al gobernador y precandidato presidencial justicialista Néstor Kirchner los actos por el 60º aniversario de la fundación de Río Turbio, el Presidente anunció el fin de “un modelo económico perverso de concentración, que enriqueció a los que tenían plata”, mientras, en contrapartida, “arrastró” a situaciones límite a millones de argentinos. Esta retórica dominó toda su intervención.
Duhalde contrastó ese modelo que calificó de “antiindustrial” con la valoración que hoy tiene la producción nacional gracias al nuevo tipo de cambio, que en Santa Cruz beneficia a “lanas, carnes, frutas finas” y otros productos de la región, como es el caso del carbón. “En Río Turbio lo estaban pasando muy mal”, aseguró Duhalde, pero advirtiendo que esa situación también afectaba “al resto de la Argentina”, que avanzaba, según sostuvo, “hacia la disolución nacional”.
Desde un palco celeste y blanco, engalanado con el escudo nacional, al que flanqueaban los de Santa Cruz y Río Turbio, el Presidente, luciendo saco sport azul y camisa blanca sin corbata, anunció poco después del mediodía la derogación del decreto nacional 1052, rehabilitando así la explotación de la ex empresa estatal Yacimientos Carboníferos Fiscales (YCF), tras la caída de su concesión privada.
Entre las medidas para reactivar la cuenca carbonífera, anticipó la exención del impuesto a los Combustibles, beneficiando así al que se utiliza en la generación de energía para el yacimiento, y un aporte de 200 mil pesos, solicitado por ex empleados de YCF para establecer un recorrido turístico con el tren de trocha angosta utilizado para el transporte del carbón.
“Debo ser generoso y reconocer el aporte del señor presidente”, dijo Kirchner, al recordar que durante su campaña presidencial en 1999 Duhalde había prometido soluciones “para la zona norte petrolera y para la cuenca minera” de la provincia. A las poblaciones de la región les agradeció que, “en la diversidad de ideas”, acompañan las tratativas para poner nuevamente en marcha la explotación carbonífera. “Hechos como éste van a ser reconocidos paulatinamente en todos los lugares de la Argentina”, aseguró.
Duhalde, al cerrar su mensaje, dijo que al reactivar “el emprendimiento industrial más austral” del país “estamos poniendo en marcha un modelo económico productivo”, tras “cuatro años de recesión por ese modelo que se desplomó... Sobre los escombros del anterior se recrea un nuevo modelo que hace que hoy valga la pena trabajar en la Argentina”, por lo que instó a los jóvenes a que “sueñen y recreen las utopías” y a “no escuchar a los agoreros”.