EL MUNDO › LA CONFERENCIA EPISCOPAL SE SUMA A LAS CRíTICAS DEL PAPA

Obispos contra Berlusconi

El diario de los obispos, Avvenire, pidió que se clarifique rápidamente la situación, ya que se trata de una historia “tremenda y que ofende”, en referencia al caso Ruby, la menor que habría cobrado por acostarse con el primer ministro.

Primero fue el Papa, ahora les toca a los obispos juzgar la conducta moral del primer ministro italiano. El Consejo Permanente de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) abordará el próximo lunes el caso Ruby, la menor marroquí que supuestamente mantuvo relaciones pagas con el premier Silvio Berlusconi, y que ha desatado una tormenta política en Italia.

Así lo anunció ayer el presidente de la CEI, cardenal Angelo Bagnasco.

“El lunes se hablará en el Consejo Permanente de la CEI, que es el lugar institucional”, con sede en Ancona, dijo. Para preparar el Consejo, el cardenal Bagnasco se trasladará hoy a Ciudad del Vaticano para reunirse con el papa Benedicto XVI.

Ya el pasado 18 de diciembre, el diario de los obispos, Avvenire, había pedido que se clarifique rápidamente la situación, ya que se trata de una historia “tremenda y que ofende”, en referencia al caso Ruby. “Sólo la idea de que un hombre que ocupa un alto cargo del Estado está implicado en historias de prostitución y, peor aún, de prostitución de menores, es tremendo y ofende”, escribe hoy el director de Avvenire, el diario de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI), Marco Tarquinio, en un editorial sobre el caso Ruby.

Tarquinio hace un llamamiento a la “sobriedad” de la clase política y recuerda unas recientes palabras del cardenal Angelo Bagnasco, en las que afirmó que “en cualquier campo, cuando se desempeñan cargos de visibilidad la conducta no puede separarse del papel que se ocupa”. Acorralado por el escándalo, Berlusconi combate sin tregua contra las acusaciones de inducción a la prostitución de menores y resiste en el poder gracias al apoyo de su aliado Umberto Bossi y parte de su electorado.

“Descanse Berlusconi, que nosotros nos ocupamos del resto”, declaró el viernes Bossi, el controvertido líder del movimiento antiinmigración Liga Norte y mayor aliado del jefe de gobierno. “Es inútil que le pidan la renuncia. No lo hará”, aseguró Bossi. “Berlusconi es un jefe de gobierno y no un mafioso, no deben controlarlo así”, protesta el líder norteño, quien cerró filas entorno del jefe de gobierno para defenderlo de uno de los peores escándalos de su carrera política.

Pero el nuevo escándalo de sexo y abuso de poder amenaza con poner fin a la carrera del magnate de las comunicaciones. Berlusconi fue acusado por la fiscalía de Milán de haber pagado para tener relaciones sexuales con Ruby y de haber utilizado su cargo para evitar la detención de la joven por un supuesto robo.

Dos figuras importantes intervinieron ayer frente a la divulgación de numerosas escuchas telefónicas y testimonios de jóvenes mujeres que aseguran haber participado en las controvertidas fiestas organizadas en la residencia privada del millonario primer ministro, Villa Arcore, en las afueras de Milán.

El presidente de la República, Giorgio Napolitano y, en forma indirecta, el papa Benedicto XVI, abordaron anteayer el asunto. “Los nuevos desafíos que tenemos ante nosotros exigen (...) que la sociedad y las instituciones públicas recuperen su propia alma, sus raíces espirituales y morales”, dijo el Papa al recibir en el Vaticano a representantes de la policía de Roma.

El Pontífice, que no mencionó explícitamente a Berlusconi, invitó a los italianos a dar “una nueva consistencia a los valores éticos y jurídicos de referencia”. El jueves, el Vaticano tomó distancia del primer ministro tras una inusual amonestación del secretario de Estado de la Santa Sede, Tarcisio Bertone, quien pidió a la clase dirigente italiana que tenga “más moralidad”.

Los abogados del multimillonario primer ministro informaron legalmente a la fiscalía que Berlusconi no acudirá a los interrogatorios y recusaron además ese fuero como ilegítimo. Pese al conflicto judicial, la fiscalía resolvió proseguir la investigación y solicitar la realización de un proceso rápido hacia mediados de febrero. Además de delitos sexuales, Berlusconi ha sido acusado en sede judicial de corrupción y vínculos con la mafia. El niega todo y dice que los jueces lo persiguen por razones políticas.

Compartir: 

Twitter

Berlusconi insiste en que no hizo nada malo, pero el Papa y los obispos lo censuran.
Imagen: AFP
 
EL MUNDO
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.