Dos soldados israelíes resultaron heridos y dos militantes habrían muerto ayer dentro del Líbano en fuertes enfrentamientos en la zona fronteriza. El cruce de disparos, que comenzó después de un ataque contra las Fuerzas de Defensa Israelíes (IDF) con un cohete Katyusha a una base cercana a la ciudad de Safed en el norte de Israel, es el primero de este tipo desde principios de febrero. Las fuerzas israelíes utilizaron artillería y aviones para bombardear las bases de Hezbolá en el sur libanés, después de que el movimiento guerrillero abriera fuego, con ametralladoras y morteros, contra las comunidades israelíes del norte y los puestos militares, hiriendo a un soldado de la unidad antiaérea.

Mientras el ejército les aconsejaba a los pobladores del norte israelí que se escondieran en los refugios, Hezbolá afirmaba que uno de sus combatientes había muerto en los seis bombardeos de la tarde. Los enfrentamientos terminaron anoche luego de una intervención de los soldados de paz de la ONU. Antes, el Comando General del Frente Popular para la Liberación Palestina (PFLP-GC, por sus siglas en inglés) aseguró que uno de sus militantes había muerto en un ataque de la Fuerza Aérea israelí a su base en Luci, en el valle occidental Bekaa. Las IDF también golpearon a otro bunker del PFLP-CG en Nem’a, cerca de Beirut. Además, ayer desde la dirigencia de este partido palestino, que tiene tres diputados en el Consejo Legislativo Palestino, anunciaron que quieren unirse al gobierno de Hamas y que iniciarán negociaciones para hacerlo.

El primer ministro israelí, Ehud Olmert, afirmó que la respuesta israelí después de los ataques aéreos matutinos fue una “seria advertencia a los elementos palestinos en el Líbano, de lo que pasará si los tiroteos continúan”. Anwar Raja, el representante del PFLP-GC en el Líbano, dijo por su parte que “Israel usó los cohetes que fueron disparados al norte de Israel como un pretexto para asaltar la soberanía libanesa. Esto revela los peligros que los libaneses y los palestinos enfrentan con Israel”.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.