EL PAíS › CFK CAMBIA EL ENFOQUE DE SUS VIAJES AL EXTERIOR

En plan de negocios

 Por Fernando Cibeira

Con la crisis económica internacional golpeando las puertas y un nuevo mundo multipolar que emerge, la presidenta Cristina Kirchner resolvió transformar sus próximos tres viajes presidenciales en megamisiones comerciales, en la búsqueda de nuevos mercados para los productos argentinos. Así lo definió en un encuentro que mantuvo esta semana con el canciller Jorge Taiana, en el que acordaron que la Argentina debía intensificar su presencia en los países en desarrollo y en los mercados emergentes, dado que todo pinta que esta vez los más ricos serán quienes más sufran las consecuencias por la debacle. El norte de Africa, Rusia y la India, los primeros destinos pero no los únicos tras esta estrategia.

En el Gobierno se jactan de que las exportaciones argentinas están lo suficientemente diversificadas como para no depender de nadie: aproximadamente se dividen por tercios entre el mundo desarrollado –-Estados Unidos y la Unión Europea–, los países de la región –con amplia preponderancia de Brasil– y el resto del mundo –principalmente China, Corea, India y el mundo árabe–. Lo más probable es que ninguno de ellos escape a los efectos de la crisis. Pero, de los tres sectores, con quienes menos la Argentina buscó históricamente acrecentar los lazos comerciales es con este último grupo de países en desarrollo. Justamente los que, se especula, podrían convertirse en los motores de una economía –y por ende una política– mundial de nuevo signo. Hacia allí apuntará los cañones el Gobierno argentino.

La primera misión comercial que encabezará la Presidenta será el 16 de noviembre cuando inicie un veloz raid por Africa del Norte, que comprenderá Chipre, Argelia, Marruecos, Egipto y Libia. Los países del Magreb han sido tradicionales compradores de alimentos argentinos. La misión comercial apuntará a que esos mercados se abran también para los productos con mayor valor agregado, deseo que la Presidenta no deja de mencionar en sus discursos. En la misión, adelantaron, habrá un avión en que se mezclarán los empresarios pymes con algunos “top”, cada uno en busca de crearse su oasis en el desierto. Para dar una idea, en el acto del lanzamiento de la misión participaron 150 hombres de negocios.

Hay expectativas respecto de los acuerdos que puedan cerrar industrias como la automotriz o la de maquinaria agrícola. En la Cancillería opinan que el comercio hacia esa región todavía no está lo suficientemente desarrollado. Como ejemplo, ponen el caso de Argelia, un país que cuadruplicó las importaciones argentinas en los últimos años. Así y todo, ante un total de 50 mil millones de dólares de importaciones que hace Argelia por año, las compras a Argentina apenas si arañan los 800 millones.

El objetivo se repetirá unas semanas después, el 8 y 9 de diciembre, cuando Cristina Kirchner inicie el primer viaje de un presidente argentino a Moscú en mucho tiempo. Lo justifica el espectacular crecimiento del intercambio bilateral, que se multiplicó por cuatro en los últimos cuatro años. Pasó de 310 millones de dólares en 2003 a 1207 millones en 2007: un incremento del 430 por ciento, con saldo favorable a la Argentina.

Como preámbulo, días atrás pasó por Buenos Aires el secretario de Seguridad Nacional, Nikolay Patruschev, a quien se considera el número tres del gobierno ruso, detrás de Dmitri Medvedev y Vladimir Putin. Patruschev anticipó que a partir de la crisis su país consideraba que se venía un cambio político en el mundo en el que la Argentina y América latina iban a jugar un rol importante. “Queremos dar un salto de calidad a la relación”, le dijo a Taiana.

Los rusos cada vez disimulan menos sus intenciones de convertir la región, que Estados Unidos abandonó hace tiempo, en un área de influencia. Lo interesante para los hombres de la Cancillería fue que los funcionarios rusos se mostraron dispuestos a avanzar en proyectos de cooperación en materias tan complejas como la energía nuclear o la investigación espacial. Obviamente, hay un interés importante en tener un aliado en una potencia energética como Rusia.

Para complementar el mapa de economías emergentes poderosas que la Presidenta aspira a colorear, quedó confirmado que el 4 y 5 de febrero viajará a la India, un deseo varias veces enunciado pero luego suspendido. El comercio bilateral se incrementó a pasos agigantados, con un saldo ampliamente favorable a la Argentina, con el aceite de soja como principal mercadería. La India ya anticipó que quiere incrementar la compra de alimentos argentinos, aunque la intención –aquí también– es que tengan valor agregado.

La contracara a estos planes de expansión la muestra por estos días la Unión Europea, que anunció que estudia volver a imponer aranceles a la importación de granos para proteger a sus productores, una medida que repercutirá directamente en las ventas argentinas. Por eso en el Gobierno argentino consideran prioritario apuntalar la apertura de mercados que no muestren asustados signos de retracción ante la crisis. “Está naciendo un mundo nuevo y hay que subirse al tren, cuanto antes, mejor”, graficaban.

Compartir: 

Twitter

Imagen: Pablo Piovano
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.