En un tono tal vez poco técnico pero contundente, el gobernador de Misiones, Maurice Closs, sostuvo que el tema de las escuchas telefónicas “armó un despelote” y volvió a pedirles a los jueces de su provincia que colaboren con la investigación. En Misiones se especulaba que no prosperaría el pedido de desafuero de los jueces locales Horacio Gallardo y José Luis Rey realizado por su colega federal porteño Norberto Oyarbide.

El Jurado de Enjuiciamiento de Misiones se reunió ayer para tratar el pedido de desafuero de los dos jueces que autorizaron las intervenciones telefónicas del detenido espía Ciro James, pero resolvió aguardar la documentación original del planteo impulsado por Oyarbide. Sin embargo, los trascendidos indicaban que la cuestión no prosperaría porque no cumple con al menos uno de los requisitos establecidos por la Constitución provincial: el requerimiento debe ser impulsado por un habitante de la provincia.

En medio del trámite, el gobernador Closs insistió en que “los jueces misioneros deben facilitar el acceso a la Justicia”, al ser consultado acerca del requerimiento de Oyarbide y la actitud asumida por los jueces Gallardo y Rey, quienes no hicieron caso a las citaciones. “Se ha armado un despelote con esto de las escuchas. Hay que tomar el tema con responsabilidad, los misioneros no podemos negar un tema que se instaló en el país. Yo puedo opinar, pero no puedo decidir nada”, dijo Closs.

Oyarbide, que tiene a su cargo la causa de las escuchas, solicitó el desafuero, con vistas a la eventual destitución, de los jueces Gallardo y Rey. Pero los integrantes del jury que debe resolver la cuestión vieron como un inconveniente que el juez porteño realizara el pedido vía fax, por lo que resolvieron que esperarán a que se les remita la documentación original. La reunión de hoy se extendió desde las 10 hasta pasado el mediodía y estuvo encabezada por el presidente del Jurado de Enjuiciamiento, Rubén Uset, quien además es titular del Superior Tribunal de Justicia provincial.