El juez federal Norberto Oyarbide defendió ayer su decisión de sobreseer a la presidenta Cristina Fernández y su marido, Néstor Kirchner, en la causa iniciada a partir de una denuncia por enriquecimiento ilícito. En declaraciones a la prensa, el magistrado aseguró que “a la luz de todas las pruebas el crecimiento patrimonial cuestionado, que fue motivo de esta investigación, resulta justificado” y más tarde difundió la resolución judicial con los fundamentos por los que “encuentra imperioso decretar el sobreseimiento” de los imputados. Carlos Fayt, miembro de la Corte Suprema, relativizó el fallo al asegurar que Oyarbide “es un buen juez que puede equivocarse” y sostuvo que será el máximo tribunal quien tendrá la última palabra en el caso. Por otra parte, ayer por la mañana, el dirigente peronista Juan Ricardo Mussa inició ante el Consejo de la Magistratura un pedido de juicio político contra Oyarbide por este fallo.

“Los peritos concluyen en su dictamen, luego de un análisis muy profundo y a la luz de todas las pruebas, que el crecimiento patrimonial cuestionado, que fue motivo de esta investigación, resulta justificado ante lo cual yo dispuse sobreseer al matrimonio”, explicó el juez a la prensa en la puerta de su domicilio. La pericia “se llevó adelante con la intervención del decano de peritos contadores de la Corte, otra perito también de la Corte y, por supuesto, que también intervino el contador Manzanares, que representa los intereses del matrimonio presidencial”, agregó.

A su vez, en la resolución de 18 páginas, difundida por la tarde en el sitio de Internet de la Corte Suprema, el juez explica por qué no consideró necesario llamar a la Presidenta o a su marido a una declaración indagatoria para resolver su situación procesal. “No encuentro elemento alguno que no me permita descartar con la certeza del caso la configuración del ilícito denunciado, resultando por lo tanto legalmente imperioso proceder a decretar el sobreseimiento de los aquí imputados”, escribió.

De todas formas, Oyarbide recordó que él es “juez de instrucción y de primera instancia”, por lo que el expediente sigue en manos de la Fiscalía Nacional de Administraciones Investigativas, que puede “estar de acuerdo o no estar de acuerdo y apelar”, al igual que Eduardo Taiano, el fiscal de la causa. “Taiano ya está notificado y corren los días para la apelación”, confirmó el magistrado. Al respecto se manifestó el juez de la Corte Suprema, Carlos Fayt, quien aseguró que será ese tribunal el que tendrá la última palabra en el caso. “Falta la segunda instancia y luego la Corte”, recordó el supremo, y manifestó que Oyarbide “es un buen juez que puede equivocarse.”

Por su parte, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, salió al cruce de las voces opositoras que cuestionaron el fallo, advirtiendo sobre la “parcialidad” del juez, dejando caer sospechas de “corrupción” e incluso iniciando un pedido de juicio político, como hizo ayer mismo por la mañana el polémico dirigente peronista Juan Ricardo Mussa (el mismo que invitó a Guillermo Moreno a combatir sobre un ring de box en pleno microcentro). Fernández consideró que “quedó muy claro que está todo dentro del marco de la ley” y destacó que el fallo “es una sentencia que habla con seriedad y nada menos que partiendo de una elaboración realizada por peritos de la Corte Suprema de Justicia”. En ese sentido, el funcionario remarcó que “si está todo dentro del marco de la ley, el juez no tiene que hacer otra cosa que hacer lo que hizo, que es declarar que no hay ningún tipo de delitos”.

Con respecto a la denuncia que presentó Mussa ayer ante el Consejo de la Magistratura, la diputada oficialista Diana Conti, quien resultó sorteada para instruir la investigación, le explicó a Página/12 que “está basada sólo en artículos periodísticos sobre la actuación de los peritos, no en el fallo en sí”. Ayer, en la última sesión antes del receso judicial, se designaron por sorteo todos los casos pendientes, “lo que no quiere decir que tengan entidad, sino que cada consejero analizará si los casos que le tocaron tienen entidad y urgencia”. Conti le anticipó a este diario que ése no será el caso de la denuncia de Mussa, por lo cual no va a ser tratada, al menos, hasta que termine la feria.

Informe: Nicolás Lantos.