EL PAíS

Un acto que tuvo clima de ensayo general previo a la Plaza del 25

El lanzamiento del Movimiento Evita colmó el Luna Park en apoyo al Gobierno. El bonaerense Pérsico y el secretario presidencial, Parrilli, fueron los principales oradores frente a varios miembros del gabinete.

 Por Martín Piqué

La leyenda se remonta al oráculo que en Grecia, cuatro siglos antes de Alejandro Magno, pronosticó la llegada de un rey que dominaría toda Asia. Según el mito, quien cortara el “nudo gordiano” derrotaría a los persas, el imperio más grande de esa época. ¿Qué tiene que ver aquella fábula con un acto kirchnerista en el Luna Park? Quien imaginó una relación fue el vicejefe de Gabinete bonaerense, Emilio Pérsico, principal anfitrión en el lanzamiento nacional del Movimiento Evita. “Hay un nudo gordiano que ata el país al pasado. Hasta hace poco venían científicos a decir que había que ponerle calor arriba. Pero para cortarlo se necesita una espada. Eso lo entendió nuestro Presidente. Pero muchas veces lo vemos cortar el nudo con uno de esos cuchillitos de plástico que venden en los colectivos. Entonces, lo que vamos a hacer el 25 de mayo es darle la espada al Presidente para que corte ese nudo”, dijo ayer Pérsico.

La imagen del “nudo gordiano” sirvió para reforzar el clima de preparación para el 25 de mayo que sobrevoló por el Luna Park. Convocado por una de las organizaciones sociales que adhieren al Gobierno, el acto no fue sólo la presentación del Movimiento Evita. Por la variada y numerosa presencia de ministros y funcionarios que representaban a distintos sectores internos del oficialismo, tanto como por las constantes arengas a marchar a Plaza de Mayo el 25, el acto se convirtió en un ensayo general –a mucho menor escala– de lo que pretende Kirchner para el tercer aniversario de su gobierno. “Después de 30 años la política ha vuelto a conducir los intereses de la Argentina”, destacó el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, como un argumento para que la multitud festejara. “Les doy muchas gracias en nombre del Presidente por esta verdadera demostración de militancia peronista”, agregó.

El acto comenzó con una entrega de plaquetas a personas que aportaron “a la lucha popular y la construcción del movimiento nacional”. Fue un homenaje muy heterogéneo, que incluyó desde a Hebe de Bonafini y Estela Carlotto a Hugo Moyano y Víctor De Gennaro (ver aparte). También había orígenes e historias muy diversas entre los dirigentes que se ubicaron en el escenario, bajo un enorme cartel azul con la cara de Evita joven y con el pelo largo, la imagen que en los ’70 se volvió marca registrada de la Tendencia revolucionaria. No fue la única referencia a la izquierda peronista: “Y ya lo ve/ y ya lo ve/ es la gloriosa JP”, sonó varias veces. A ambos lados del orador de Pérsico estaban Parrilli; la titular del PAMI, Graciela Ocaña; la senadora Marita Perceval; los diputados Patricia Vaca Narvaja, Juliana Di Tullio, Rubén Daza, Cristina Alvarez Rodríguez y Luis Ilarregui; el ministro de Salud, Ginés González García; el secretario de Obras Públicas, José López; y el titular de la SIDE, Héctor Icazuriaga. Los convocantes se habían ubicado como en la foto de un equipo de fútbol. En la fila de atrás del palco se los veía al secretario de Derechos Humanos bonaerense, Edgardo Binstock; el titular de Cascos Blancos de la Cancillería, Gabriel Fuks, y otros funcionarios, la mayoría bonaerenses.

Desde La Plata había llegado el gabinete en pleno de Felipe Solá. Se ubicaron abajo, en la primera fila de asientos. Entre ellos estaban el diputado Carlos Kunkel, el secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde, y el secretario de Integración Económica de la Cancillería, Eduardo Sigal. El primer orador fue el intendente de Gualeguaychú, Daniel Yrigoyen. Luego llegó el turno de la diputada Vaca Narvaja. Tras elogiar a Kirchner, hizo un homenaje a los desaparecidos. “El pueblo pelea/ pelea y no olvida/ ni a los vendepatrias/ ni a los genocidas/ Por Maxi y Darío/ y el Oso Cisneros”, comenzó a cantar la multitud.

El Luna Park estuvo lleno durante casi todo el acto. Cuando promediaba el último discurso comenzaron a verse claros en las tribunas. Las banderas seguían flameando. Estaba hablando Pérsico. “Desde los medios nos menosprecian, dicen que los que están acá vienen a buscar un cargo. No es así. Nosotros sabemos que no hay proyecto nacional sin movimiento nacional. Hay que incorporar todas las contradicciones sociales y políticas dentro de este movimiento. Como hizo Perón”, dijo. A partir de tópicos históricos del peronismo, como el movimientismo policlasista y un Estado que incorpore a todos, Pérsico se animó a hablar sobre las “disyuntivas” que atraviesa el Gobierno. “Sabemos que es contradictoria la unidad latinoamericana con la necesidad de Bolivia de defender su gas. Que el tema salarial es contradictorio el aumento salarial con la inflación. Esas contradicciones están todos los días. Perón también tuvo esas disyuntivas. Así fue en el pasado. En 1952 no pudimos imponer la fórmula (por Perón-Eva Perón) y en 1973, en la Riccheri, no pudimos manejar las contradicciones. Ahora queremos estabilizar este proceso. Por eso vamos a la Plaza. Estamos yendo para adelante para no volver atrás”, afirmó.

Compartir: 

Twitter

Perceval, Pérsico, Parrilli, Vaca Narvaja y Ocaña estuvieron juntos en el acto del Movimiento Evita.
SUBNOTAS
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.