EL PAíS › LA TRAYECTORIA DE LUIS JUEZ

Con estilo propio

La mayoría de quienes hayan escuchado su discurso político, que mezcla un estilo desfachatado, provocador y humorístico, quizás desconozca que Luis Alfredo Juez realizó sus estudios secundarios en el Liceo Militar General Paz, donde ingresó en marzo de 1977, y egresó en noviembre de 1981 –en plena dictadura–, perteneciendo a la Promoción 33 “Cristo Rey” como Subteniente de la Reserva. El intendente de la ciudad de Córdoba y candidato del Frente Cívico y Social, que al cierre de esta edición peleaba voto a voto la gobernación cordobesa, tiene 43 años, se recibió de abogado en 1986, está casado y tienes tres hijos. Con todos ellos (su esposa María Victoria y sus hijos Agustina, Martín y María Milagros) fue a votar ayer. Dentro de once días, su nuevo cumpleaños puede encontrarlo armando su futuro gabinete provincial o en su estudio de abogado, ejerciendo la profesión y militando en ese movimiento “transversal” que desde hace años imagina junto a sus “amigos”: el socialista santafesino Hermes Binner, el diputado entrerriano Emilio Martínez Garbino y el bonaerense intendente de Morón, Martín Sabbatella.

Juez comenzó su trayectoria política en 1987, cuando fue designado presidente de la Juventud Peronista. Fue diputado provincial por el PJ cordobés entre 1994 y 1995, y consiguió su reelección. El 16 de septiembre del 96 renunció a la banca en desacuerdo por el aumento de las dietas de los legisladores, y los cordobeses empezaron a conocer su filosa lengua. En septiembre el 99 se enfrentó al gobernador Juan Manuel De la Sota y participó de la interna del PJ por la candidatura a intendente, en la que tomaron parte Juan Schiaretti y Germán Kammerath, quién terminó como triunfador.

Se mantuvo dentro del PJ, fue director de Vialidad Provincial durante el año 2000, y fiscal Anticorrupción –impulsado por De la Sota– desde septiembre de ese año hasta octubre del 2002. Como fiscal se enfrentado a política económica y la administración provincial, De la Sota lo echó y Juez rompió definitivamente lanzas con el gobernador. Con la lucha anticorrupción como bandera fundó el Partido Nuevo y en las elecciones de 2003 humilló al candidato delasotista, a quien le sacó 30 puntos de diferencia, y se convirtió en intendente de la ciudad de Córdoba.

Las promesas de pactos de no agresión no funcionaron y se desató una pelea sin fin entre el municipio y la gobernación. Su sublevación para no firmar el pacto fiscal de la provincia le valió que durante seis meses sólo recibió de coparticipación provincial el aporte simbólico de un peso. Juez jamás se lo perdonó a De la Sota, enfrentó a su delfín, Juan Schiaretti, y en sólo dos meses de dura campaña emparejó una amplia diferencia que parecía indescontable. Ayer –al cierre de esta edición– amenazaba con arrebatarle la gobernación a la oficialista Unión por Córdoba, que encabeza el PJ provincial. Una revancha que Juez empezó a paladear recién en los últimos días de la campaña, pero que todavía no podía disfrutar hasta que se cuente el último voto.

Compartir: 

Twitter

SUBNOTAS
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.