ESPECTáCULOS › CONCLUYO EL FESTIVAL DEL CINE LATINOAMERICANO DE LA HABANA

La Argentina premiada en Cuba

El cine nacional se llevó los principales galardones de la muestra cubana, con films de Diego Lerman, Carlos Sorin y Adrián Caetano. La productora Lita Stantic fue homenajeada con un reconocimiento especial del jurado.

Argentina y Brasil se alzaron con los primeros premios en la categoría de ficción del XXIV Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana que concluyó ayer, tras diez jornadas maratónicas de exhibiciones. Tan de repente, de Diego Lerman, aún inédita en nuestro país, y Ciudad de Dios, del brasileño Fernando Meirelles, compartieron el primer premio Coral de ficción del certamen. En una performance arrasadora, el cine argentino, a su vez, se aseguró el premio especial del jurado para Un oso rojo, de Adrián Caetano, mientras Historias mínimas, de Carlos Sorin, obtuvo el segundo premio Coral. El conjunto de intérpretes de Tan de repente se llevó el premio a la mejor actriz, mientras que Lita Stantic, productora de los films de Lerman y Caetano, fue homenajeada con un premio especial de reconocimiento del jurado.
Tan de repente, una road movie fuera de norma, inspirada en un relato de César Aira y producida al margen de las estructuras de la industria, llegó al primer premio de La Habana después de haber recorrido triunfalmente buena parte del circuito de festivales internacionales. Descubierta en abril pasado en el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente, donde obtuvo tres premios, la película del debutante Lerman (27 años) ganó en julio el segundo premio de la exigente muestra suiza de Locarno, para después llevarse el Colon de Plata al mejor guión original en el Festival de Cine de Huelva, España. La película ya tiene asegurado su estreno comercial en Francia y España y el director Lerman obtuvo la beca de la Cinéfoundation, del Festival de Cannes, reservada a un círculo muy reducido de realizadores, para escribir en Francia el guión de su segunda película.
Por su parte, Historias mínimas, que también fue vendida a los principales circuitos de distribución europeos, ya había ganado en septiembre el segundo premio del Festival de San Sebastián, mientras que Un oso rojo (que ayer en La Habana también fue premiada con un Coral a la mejor música, de Diego Grimblat), competirá en enero en Sundance, la principal vidriera del cine independiente en los Estados Unidos, donde la película tiene la posibilidad de saltar el circuito de estreno norteamericano. A su vez, también por Argentina, el documental H.I.J.O.S. el alma en dos, de Carmen Guarini y Marcelo Céspedes, obtuvo una mención especial.
Por el lado brasileño, Ciudad de Dios se convirtió en la película más premiada de este festival, al recibir también los galardones de fotografía, para César Charlone; edición, para Daniel Resente, y también el de actuación masculina, para el elenco de intérpretes, en su mayoría aficionados. La película, basada en un libro de Paulo Lins sobre personajes reales de una favela de Río de Janeiro, narra una historia descarnada de violencia y marginalidad. Como hilo conductor del film, sostenido estructuralmente en una valiosa investigación periodística, se erige un joven interesado por la fotografía y vinculado a los ambientes de la villa miseria. La película de Fernando Meirelles también recibió el premio Glauber Rocha, de la prensa extranjera acreditada en el festival; el de la Oficina Católica Internacional de Cine (OCIC) y el de la Federación Internacional de Prensa Cinematográfica (Fipresci). Además, el de la emisora Radio Habana Cuba, el de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) y el galardón de la Asociación de Críticos de Cine de la isla caribeña.
Por su parte, la mexicana El crimen del padre Amaro, que llegó a La Habana en medio de grandes expectativas y fue seleccionada para la inauguración del festival, tuvo que conformarse con el Coral al mejor guión (Vicente Leñero), por su adaptación de la novela del portugués Eça de Queiroz. Por países, Brasil se llevó en total nueve premios oficiales, seguido de Argentina, con siete. La ausencia más notable fue del país anfitrión, Cuba, que no presentó largometrajes de ficción y terminó con pocos premios. El jurado de ficción estuvo presidido por el mexicano PaulLeduc e integrado por el venezolano Alberto Arvelo, el brasileño José Joffily, el uruguayo Jorge Ruffinelli y la actriz cubana Eslinda Núñez.

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“Ciudad de Dios”, del brasileño Fernando Meirelles, compartió el primer premio con el film de Lerman.
 
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