PIRULO DE TAPA

PINGÜINO

Desde Formosa le avisaron a la comitiva oficial que los esperaba el habitual calor de la provincia. Pero una oportuna lluvia bajó la sensación térmica aunque no alcanzó a enfriar la oratoria presidencial. “Cuando algunos economistas nativos con ideas no tan nativas dicen que la Nación debería pagar más, yo los llamaría para que vengan conmigo y vean los rostros que están reclamando justicia social. Lo que quieren es hambrear más adentro y pagar más afuera”, aseguró Kirchner que, para cerrar su discurso, agradeció por la lluvia a “Dios y a los formoseños. Me decían que hacía 50 grados... adiós pingüino si pasaba eso”.