El presidente de la Unión Cívica Radical (UCR) de Zárate, Sergio Formigoni, fue asesinado de tres balazos en la madrugada de ayer, al parecer porque intentó resistirse al robo de un auto. El hecho ocurrió a la 0.15 del sábado, cuando el dirigente de 65 años intentaba abrir el portón de su casa, en el barrio residencial de Villa Fox, conduciendo el automóvil BMW de su hijo. Cuando se estaba abriendo el portón aparecieron dos hombres armados a bordo de una moto y le exigieron que entregara las llaves del vehículo. En ese momento fue que se resistió y le dispararon tres veces, directo al tórax. El fiscal de Zárate-Campana, José Martín Zocca, afirmó que “hay testigos que presenciaron parte de lo sucedido”, motivo por el cual estaría confirmado que fue un intento de robo. De todos modos, el fiscal advirtió que no se puede “dar el lujo de descartar ninguna línea de investigación”. La vicepresidenta de la UCR de Zárate, Elba Montero, dijo que la víctima era “una excelente persona, muy querido por los pobladores de Zárate”. Consideró también que el crimen “no tiene ningún tipo de vinculación política” y que es “un hecho de inseguridad como los que ocurren todos los días en Zárate”. Anoche fue detenido uno de los supuestos autores del homicidio.

Fuentes del radicalismo admitieron que Formigoni llevaba consigo un arma, guardada en la guantera del coche, “por cuestiones de defensa personal, porque estaba preocupado por la inseguridad”. De todos modos, en este caso ni siquiera habría tenido tiempo para ensayar una defensa. Elba Montero comentó que la mujer de Formigoni “fue quien, al escuchar los disparos y salir a ver lo que sucedía, vio tirado y muerto a su marido en la puerta de su casa”. La mujer se comunicó con el 911 y al lugar concurrió un móvil de la comisaría primera de Zárate.

Montero confirmó que “el tema de la inseguridad lo tenía muy preocupado a Formigoni”, quien este año pensaba retirarse de la actividad partidaria, aunque “iba a seguir militando como siempre, pero le parecía que su misión estaba cumplida”. Al dirigente de la UCR lo mataron cuando regresaba de participar de una reunión político-partidaria. “Hemos perdido a un gran hombre, a un trabajador de la política en nuestro partido. Ahora vamos a apoyar a su mujer y a su hijo, que están totalmente destrozados”, declaró la vicepresidenta del radicalismo de Zárate.

El presidente de la UCR bonaerense, Miguel Bazze, en un comunicado de prensa, expresó su pesar por lo sucedido. “Esto golpea y enluta a todo el radicalismo por la pérdida de un dirigente ejemplar, que hizo del esfuerzo por lograr una sociedad mejor su forma de vida.” Consideró que su gestión en Zárate al frente del Comité radical “se caracterizó por el mayor desprendimiento y compromiso con los valores partidarios”. Sostuvo que “su injustificable muerte es consecuencia del desastre de la seguridad en la provincia de Buenos Aires y en el país en general”.

Favio Formigoni, hijo del dirigente radical asesinado, le dijo a la prensa que a su padre “lo mataron como a un perro. Lo quisieron asaltar y cuando abrió el portón de la vivienda, lo balearon”, relató el joven, quien pidió a las autoridades “que se haga justicia por esta muerte”. El cuerpo del dirigente radical fue trasladado a la morgue judicial de Zárate para realizarle la autopsia y luego fue entregado a su familia.

Formigoni, un ex empleado de Siderca y jubilado de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), presidía la UCR de Zárate desde 2010 y finalizaba su mandato este año. Los restos eran velados en una casa de sepelios ubicada en Brown 688, de Zárate, y hoy serán trasladados al cementerio privado Campana de Paz, de Pilar. La policía informó anoche que en jurisdicción de Zárate fue detenido un joven que sería el presunto autor material del crimen. Está prófuga la persona que lo acompañaba.