Al parecer, de contemplar su arco cromático, el hit eterno de Cristian Castro sería la canción que mejor le sentaría a Internet. Al menos, de dar por válido el estudio recientemente publicado por el joven diseñador Paul Hebert que, tras analizar la paleta utilizada por los sitios más visitados, arribó a tamaña conclusión: que el color más popular en Internet es el azul. “Las páginas con más tráfico se colorean dos veces más con distintos tonos de azul que con amarillos y rojos, y tres veces más que con verdes”, resume Wired, que conversó con el empeñoso Hebert sobre tan peculiar interés. “En mis trabajos, a menudo tengo dificultades para crear esquemas de color, y tenía curiosidad acerca de lo que hacían otras compañías”, justificó el señorito, que puso en su mira a las diez páginas con más usuarios a nivel global, según la empresita estadista Alexa.com, subsidiaria de Amazon. Entre ellas, Google (en la posición 1), Youtube (2), Facebook (3), Yahoo (5), Wikipedia (6) y Twitter (10)

Así, tras encontrar los colores de las mentadas homepages, el estadounidense sistematizó sus hallazgos a través de diferentes visualizaciones, haciendo pertinente distinción entre tinte, saturación y luminosidad. “Tras la información arrojada se esconden interesantes observaciones. Por ejemplo, si bien es harto sabido que Facebook usa mucho azul en su diseño, también usa un sorprendente rango de otros colores: casi tres veces más que Google, Wikipedia y Baidu. Amazon, en cambio, difícilmente incorpora el azul, apoyándose en cambio en un amplio espectro de tonalidades cálidas. En el caso de Yahoo, bueno, la paleta es prácticamente un caleidoscopio”, esgrime Wired. Y agrega que el análisis de Paul es un trabajo en proceso que pronto incorporará más sitios, incluyendo listas sobre preferencias según los países. “Con los futuros datos completos espero responder preguntas profundas sobre el diseño. Si la extendida utilización del azul, por caso, es un aspecto intrínseco de la condición humana, o si varía a través de las culturas y el tiempo”. Preguntas profundas, sin lugar a dudas.