El Observatorio sirio para los derechos humanos sostiene que fueron 23 los muertos en Homs "golpeada por la artillería". El más afectado fue el barrio de Bab Amro donde, según el último balance, "hoy 15 personas murieron y decenas resultaron heridas". Según las mismas fuentes, que suministraron detalles sobre la identidad de las víctimas, siete civiles murieron en otro barrio de la ciudad, mientras una mujer perdió la vida en la vecina localidad de Talbisse.

Se trata de un "verdadero asedio", dijo el Consejo Nacional Sirio (CNS), según el cual el domingo el barrio de Bab Amro estuvo "bajo la amenaza de una verdadera invasión militar con cerca de 4 mil soldados. A eso se agrega el bombardeo continuo sobre Homs que dura desde hace días".

Por ello el CNS pidió que fuese Homs la primera etapa de los observadores en el país: "vengan a ver", exhortaron. Hoy el mismo Consejo destacó que las restricciones impuestas por Damasco a la acción de los observadores, motivadas por "razones de seguridad", impedirán a la delegación trabajar.

"Algunos observadores están ya en Homs, pero dijeron que no pueden dirigirse a los lugares donde las autoridades no quieren que vayan", resaltó el presidente del CNS, Burhan Ghalioun, en una conferencia de prensa en París.

Desde Francia, lanzó una apelación a las autoridades de Damasco que "deben absolutamente permitir, conforme al plan de la Liga Árabe, el ingreso de los observadores en la ciudad".

Por ahora, son sólo verificables las intenciones manifestadas: fuentes de los observadores en el Cairo afirmaron esta mañana que la misión comenzará desde la ciudad rebelde, para luego visitar también la capital Damasco y las ciudades de Hama e Idlib.