Según Draghi, los líderes necesitan asegurarse que los fondos de rescate de la Comunidad "estén bien dotados con un mandato efectivo y flexible" y que los bancos no dejen de ofrecer préstamos a la economía real para cumplir con regulaciones de capital más duras de la Unión Europea (UE). Los bancos europeos, que tienen una gran cantidad de bonos estatales de la zona euro, para compensar la pérdida de su valor, deberían seguir las directivas de la Autoridad Bancaria Europea, que ordenó a las entidades crediticias que eleven al nueve por ciento la proporción de capital de sus valores de alto riesgo para junio.

Draghi dijo que "debe prestarse atención" para garantizar que los bancos cumplan con el objetivo elevando el capital fresco en lugar de restringir la oferta de préstamos a empresas y hogares. El retraso en la expansión del rol del fondo europeo de rescate FEEF ha hecho que la vida sea "aún más difícil" para los prestamistas, consideró el jefe del BCE, quien añadió que el ejercicio de recapitalización de bancos no está "sincronizado".

Draghi explicó que la reforma prevista del FEEF, que aún debe ser aplicada, ayudaría porque le permitiría al fondo comprar bonos estatales de la eurozona en problemas, lo que mitigaría la pérdida de los bancos, y serviría para que actúe como prestamista de última instancia para la recapitalización de las instituciones bancarias. El ex gobernador del banco central italiano habló ante el comité de asuntos económicos del Parlamento de la UE en su condición de jefe de la Junta Europea de Riesgo Sistémico, la autoridad de control de la estabilidad financiera de la UE.

Desde octubre, cuando su antecesor, Jean-Claude Trichet, advirtió a los legisladores de la UE que la crisis de la eurozona había alcanzado niveles "sistémicos", la situación "continuó empeorando", indicó Draghi.