Hay un nuevo detenido por el crimen del colectivero Leando Alcaraz, arrestado el domingo pasado de dos balazos. Se trata de un hombre de 24 años, detenido en la localidad bonaerense de Virrey del Pino, en La Matanza, en el mismo barrio donde el chofer fue acribillado, y que fue identificado por tres testigos en una rueda de reconocimiento.

Los investigadores aseguraron que la detención de Juan Alfonso Gauto, de nacionalidad paraguaya, se concretó el martes pasado durante un allanamiento realizado en una construcción precaria ubicada en la calle Martín García y Urundel, de Virrey del Pino, a pedido del fiscal Emilio Spatafora, del Fuero Penal de Responsabilidad Juvenil de La Matanza, a cargo de la causa.

Ese procedimiento surgió tras la indagatoria del detenido Jonathan Acevedo (18), apodado "El Viejo", quien le dijo al fiscal Spatafora que los asesinos de Alcaráz habían sido "los paraguayos del fondo".

Acevedo relató que el domingo alrededor de las 16.30 se encontraba sentado en la puerta de su casa junto a dos amigos, cuando llegó su amigo (el otro detenido por el caso, que es menor de edad) y éste le contó que “dos paraguayos” habían baleado a un chofer de colectivos.

Por este motivo, se dirigió junto a sus tres amigos y su madre a la plaza de San Pedro de la localidad bonaerense de Virrey del Pino, donde ocurrió el hecho. El imputado declaró que a la 1 del lunes policías le patearon la puerta de la casa y lo llevaron detenido a la comisaría de Virrey del Pino, donde estuvo hasta las 8 de la mañana, cuando fue liberado y volvió a su hogar.

Según consta en su declaración, durante las horas que estuvo detenido, los policías le decían a Acevedo que había sido el culpable del crimen y le sacaron muchas fotos pero en su casa durante el allanamiento no encontraron ningún elemento incriminatorio.

En su relato, Acevedo contó que a las 16 de ese mismo lunes fue despertado por su hermana, quien le dijo que fotos suyas y de su amigo se habían viralizado en redes sociales y que eran señalados como los autores del asesinato de Alcaraz.

Por este motivo, la madre de Acevedo se comunicó con la mamá del otro acusado para presentarse de manera conjunta en la comisaría y enterarse de lo que “estaba ocurriendo”, pero que al dirigirse en remis fueron interceptados por la Policía y aprehendidos de inmediato.

El imputado declaró que una vez en la comisaría, su amigo le contó al oído que los asesinos del colectivero eran “los paraguayos del fondo”, a los que “conocen de vista, pero no sus nombres”.

Acevedo dijo que uno de ellos tiene alrededor de 30 años, “1,75 de altura, tes blanca, cabello con rulos de color medio rojo” y que al otro “no lo conoce”. Con ese testimonio junto a otros elementos de prueba, el fiscal solicitó nuevos allanamientos y detuvo al nuevo sospechoso.