Ayer por la tarde, y tras cuarenta horas de detención, fueron liberados los tres jóvenes que la policía “cazó” el martes por la noche, tras reprimir una protesta de vecinos del Barrio Carlos Mugica (Villa 31) que reclamaban, frente al destacamento, porque un cuatriciclo policial había atropellado a una nena de seis años. En tanto, Ramiro Ruiz, el joven de 22 años baleado durante la represión, continúa internado en el Hospital Fernández con la bala alojada en el pulmón y en coma farmacológico.

Los tres jóvenes, Matías, Kevin y Brian, que permanecieron detenidos en la comisaría 15ª, en Suipacha 1156, estuvieron acompañados por una vigilia que hicieron durante las cuarenta horas de detención integrantes del Frente de Organizaciones en Lucha, al que pertenece la madre de uno de los detenidos, y vecinos. Por la mañana, fueron trasladados al Juzgado Nacional de Primera Instancia N° 63, y luego de ser indagados fueron liberados imputados por resistencia a la autoridad y daños leves, aunque los primeras versiones policiales hablaban de tenencia de armas y disparos. Relato que no se verifica en ninguno de los videos que circularon en las redes sociales, y que no condice con el hecho de que no hay policías heridos ni se secuestraron armas de fuego.  

El abogado de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), Juan Ignacio Maurin, quien representa a Kevin Herrera, dijo que los jóvenes, quienes fueron liberados bajo caución juratoria, no estuvieron en el lugar de los hechos. Y que en el caso de Kevin, “la vicerrectora de la escuela nocturna a la que asiste acompañó con una nota que acreditaba que él volvía de la escuela ese día. Matemáticamente no pudo estar mientras ocurrían los incidentes como los relata la policía”, explicó el letrado.