YPF se hará cargo de la operación de la petrolera Oil Combustibles y por ello desembolsará 3,3 millones de dólares por mes, definió ayer el juez en lo Comercial Javier Cosentino. Oil Combustibles, parte del Grupo Indalo, de Cristóbal López, fue declarada en quiebra el pasado 11 de mayo por una deuda con la AFIP de un total de 21 mil millones de pesos entre capital e intereses en concepto del impuesto a los combustibles, que la empresa cobró a los clientes pero no giró al fisco. YPF se impuso sobre otros postulantes interesados y se quedó con la operación de Oil. El principal interés de la petrolera estatal alrededor de los activos de Oil radica en la zona del puerto y el área logística en San Lorenzo, Santa Fe. Al momento de la venta de Oil, YPF junto a Dapsa, su socia en este proyecto, tendrán preferencia sobre las otras ofertas. 

La continuidad de la operación de Oil fue disputada por cinco proyectos privados: YPF junto a Dapsa, Petroil, Trafigura, Lukoil y la Cooperativa Petroleros Santafesinos. Cada uno presentó una oferta económica sujeta a una serie de condiciones.

“El precio se erige como un factor relevante no sólo respecto a su cuantía sino en cuanto a la moneda pactada y al plazo de su abono. En efecto, el plan de cancelación propuesto por Dapsa e YPF es de 3,3 millones de dólares mensuales, ampliamente superior a Lukoil (45 millones de pesos), a Trafigura (28,7 millones de pesos) y a Petroil (150 mil dólares) por igual período”, justificó su decisión el juez, entre otros argumentos.

La otra cuestión que ponderó el juez Cosentino es el abastecimiento de la red de distribución de Oil. “Al respecto, Dapsa e YPF garantizan, sin condicionamientos y asumiendo el riesgo de la operación, el abastecimiento de la totalidad de la red de estaciones de servicio de bandera Oil con combustibles de calidad”, destacó el magistrado. Entre los activos más importantes de Oil está la refinería de San Lorenzo, que cuenta con una ubicación privilegiada por el acceso al río Paraná, puente de conexión para el transporte interno y también para el comercio exterior, y unas 200 estaciones de servicio, que sufrieron una purga ante el traspaso de los estacioneros a otras marcas para asegurarse el abastecimiento.

La oferta de Destilería Argentina de Petróleo (Dapsa) e YPF consiste en hacerse cargo del abastecimiento de combustible de la totalidad de la red de estaciones de servicio de bandera de Oil a precios de mercado. Además, la oferta incluye la explotación de la totalidad de los activos logísticos en la terminal fluvial de Oil. La refinería de San Lorenzo y el acceso directo al Paraná es uno de los principales intereses de YPF. 

El traspaso de la operación de Oil luce como un escollo que afectará a los trabajadores de la empresa. “Lamentablemente, ninguna de las participantes asume con fondos propios el empleo de la totalidad de los trabajadores. Y digo la totalidad en tanto la propuesta formulada por Petroil refiere solamente al personal existente en el área operativa. Circunstancia que no compromete al plantel de toda la empresa”, señaló el juez. Ante este escenario, Cosentino dijo que la mayor oferta económica de Dapsa e YPF permitirá atender “las indemnizaciones en su integridad como así también los gastos operativos pendientes que se demanden”. Es decir que el despido de personal se plantea como un escenario muy probable.

Héctor Brizuela, dirigente gremial de la refinería de San Lorenzo, en donde trabajan 450 personas, declaró tiempo atrás que “todos se están relamiendo por el muelle, por la planta fluvial y se olvidan de la refinería. A través del muelle pueden importar combustible cada vez mas barato y venderlo cada vez más caro”.