“Estamos monitoreando con mucha preocupación lo que está pasando. Se habla mucho de la grieta política pero estamos entrando en una grieta social”, advirtió ayer el ministro de Desarrollo Social santafesino Jorge Álvarez. El funcionario confesó también que en el “segundo semestre de 2016 hubo un pico de aumento en la demanda en comedores, pero lo de ahora no se vio nunca y hay que cuantificarlo”. Alvarez fue entrevistado por el diario El Litoral luego de varios relevamientos en distintos comedores barriales, en los que se advirtió la creciente demanda de un plato de comida. “Desde enero hasta ahora creció muchísimo la demanda, y si lo medimos desde el inicio de nuestra gestión, superamos el 40 por ciento, siendo prudentes” confió Alvarez.

El funcionario responsable de llevar ayuda social explicó que “el proceso inflacionario, los aumentos tarifarios y la recesión empiezan a sentirse en determinados sectores económicos. Esto lleva a que haya una mayor demanda de asistencia de parte del Estado. Estamos recibiendo un pedido no sólo el sector más vulnerable, donde la crisis está golpeando mucho, sino también ahora del sector de los trabajadores informales —señaló el ministro Álvarez—. El trabajo informal es un trabajo de changas que la clase media lo puede posponer. Contratar un albañil o un pintor es algo que se deja para más adelante, con la pérdida del poder adquisitivo. Entonces, si hay un sector que deja de contratar ese servicio, en consecuencia hay otro sector que se queda sin trabajo. Esta realidad está golpeando mucho y lo vemos con mucha más preocupación que antes. Además, hay gente que iba a la copa de leche y ahora también va al comedor” señaló.

En esa línea, Alvarez recordó que “desde el inicio de la actual gestión (diciembre 2015), el gobierno provincial aumentó un 127 por ciento la inversión en seguridad alimentaria. Ese dinero sirve para asistir a los comedores y copas de leche. Mientras que el gobierno nacional en junio de 2016 giraba a la provincia $ 25 millones mensuales y ahora nos da lo mismo, es decir que pese al proceso inflacionario y la mayor demanda, no nos aumentó un solo peso”.

“Se lo planteamos a la ministra (de Desarrollo Social, Carolina) Stanley, a quien le pedimos una audiencia que nos aumenten las partidas”. Le pidió que “como mínimo” las dupliquen.