Horas antes del inicio de la sesión histórica donde los senadores definirán el destino del proyecto de interrupción voluntaria del embarazo, que ya cuenta con media sanción, el Senado restringió las acreditaciones a la prensa, especialmente a periodistas feministas y de medios alternativos, y blindó la entrada al Congreso para que la masiva manifestación que se espera a lo largo de la jornada no pueda acercarse a las inmediaciones. La diputada Victoria Donda denunció que tampoco está garantizado el ingreso de los diputados que quieren presenciar la sesión.

La Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito ya había denunciado en la última conferencia de prensa que el Senado había endurecido el criterio para la acreditación de la prensa excluyendo a periodistas de medios comunitarios y alternativos. Sobre todo, medios de comunicación feministas.

Sin embargo, ayer a última hora, cuando varios periodistas se acercaban hasta el Congreso para buscar su acreditación, las directoras del sitio de noticias feminista Latfem que ya estaban acreditadas recibieron una nueva noticia. Su acreditación había sido rechazada por “una alerta de seguridad” emitida en contra de dos de sus co-directoras, María Florencia Alcaraz y Agustina Paz Frontera.

“Somos periodistas comprometidas con la legalización del aborto y cubrimos el proceso parlamentario desde el primer momento como Latfem”, explicaron desde el medio. Según explicaron, ambas periodistas ya tenían los permisos concedidos pero cuando fueron a retirarlos no les permitieron el ingreso al edificio. “Nos informaron que tenemos prohibido el ingreso por insultar y agraviar a unx senadorx el miércoles 1° de agosto y que el personal de Seguridad había actuado de oficio y emitido un alerta en nuestra contra”, informaron.

“Nos sorprende que no nos hayan llamado la atención, notificado ni solicitado nuestros nombres el día en el que se nos acusa de haber incurrido en una falta. Creemos que nos ‘marcaron’. Además del ejercicio de la libertad de expresión, se ve afectado nuestro trabajo”, denunciaron en un comunicado.

La diputada Victoria Donda, una de las impulsoras del proyecto en la Cámara de Diputados, también denunció que la directiva del Senado era blindar las puertas de ingreso y que no sabía si ella como el resto de los diputados “sororos”, como nombraron al equipo que trabajó en la sanción del la ley. “Es cierto @gabimichetti que mañana los/as diputados/as no vamos a poder entrar al senado? Primero ponen trabas a la prensa, ahora esto, ¿qué quieren ocultar?”, escribió la diputada en su cuenta de Twitter y apunto directamente a la vicepresidenta Gabriela Michetti.