La comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager, anunció el miércoles pasado el veto a la fusión de Siemens y Alstom, las dos grandes figuras del mercado de infraestructuras ferroviarias, al considerar que su materialización “dañaría la competencia en el mercado de sistemas de señalización ferroviaria y los trenes de muy alta velocidad”. Según la danesa, “las partes no ofrecieron soluciones suficientes a las preocupaciones” mostradas por los técnicos europeos. Emmanuel Macron y Angela Merkel hicieron todo lo posible en los últimos meses para evitar el ‘no’ del Ejecutivo comunitario, pero la Comisión no se ha plegado ante los argumentos sobre la necesidad de tener “campeones europeos”.