La ex presidenta Cristina Kirchner fue procesada nuevamente, esta vez en una causa por presuntos subsidios irregulares a empresas ferroviarias y de transporte público automotor. El juez federal Claudio Bonadio dictó el procesamiento con prisión preventiva y consideró a CFK como “jefa de una asociación ilícita”, en una resolución que también alcanzó a empresarios y ex funcionarios.

El magistrado le dictó dos procesamientos en 48 horas a la actual senadora. El lunes, en la causa por la compra de Gas Natural Licuado (GNL), la ubicó a la cabeza de una asociación ilícita para enriquecerse ilegalmente que habría integrado junto con el ex ministro Julio De Vido, su ex secretario Roberto Baratta y otras 26 personas, incluidos empresarios como Paolo Rocca, Aldo Roggio, Marcelo Mindlin, Eduardo Eurnekian y el primo de Mauricio Macri, Angelo Calcaterra. “Es un auto de procesamiento que tiene unas 400 páginas y que define la responsabilidad presunta de Cristina Kirchner en una frase que dice ‘no debía desconocer’. Es muy lamentable que se sigan produciendo este tipo de procesamientos, de actos pseudojudiciales, y naturalmente lo vamos a apelar”, adelantó el abogado Carlos Beraldi, defensor de la ex presidenta.

Ayer, en tanto, el juez se despachó con otro procesamiento a CFK, esta vez como jefa de una asociación ilícita que además de De Vido habrían integrado los ex secretarios de Transporte, Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi, a quienes también les dictó la prisión preventiva. La medida abarcó además a empresarios que habrían pagado retornos por los subsidios investigados para acceder a la explotación de los servicios, aunque en sus casos no ordenó preventivas. La lista incluye a Sergio Taselli, Claudio Cirigliano y Gabriel Romero (ferrocarriles), Aldo Roggio (ferrocarriles y subte), a Mario Cirigliano por las irregularidades en el otorgamiento de subsidios para  colectivos, y a Pedro Ochoa Romero, que integró la CNRT.

“Creo que desde el punto de vista mediático estas noticias ya no tienen mayor impacto. Desde el punto de vista jurídico, yo tengo varios años en la profesión y nunca vi una cosa tan escandalosa”, consideró Beraldi, quien destacó que Bonadio procesa a la ex presidenta en un escrito de 400 fojas en el que define su responsabilidad con el argumento de que “no debía desconocer” las irregularidades. “Hace unos días también le dictó un auto de procesamiento en la otra secretaria, pero ahí dijo el fiscal que no correspondía dictar prisión preventiva porque no hay riesgo de fuga ni riesgo jurídico. ¿Cómo puede ser que el mismo juez, por el solo hecho de que son dos secretarias distintas, en un caso dice que corresponde prisión preventiva y en el otro no?”, se preguntó.