La pandemia de coronavirus se sigue suavizando en España, donde hoy se registraron 809 nuevos fallecidos, la cifra diaria más baja de la última semana, que eleva el total de víctimas fatales a 11.744, mientras los contagios también aumentan a un ritmo menor, con 7.026 nuevos infectados, que elevan el total a 124.736.

La cifra de fallecidos es notablemente inferior a la jornada previa, cuando se registraron 123 muertos más, hasta llegar a los 932. De acuerdo al último balance del Ministerio de Sanidad español, del total de infectados por Covid-19, 57.612 necesitaron hospitalización, de los cuales 6.532 tuvieron que acceder a las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), apenas 116 más que la jornada previa.

El dato que sigue alentando a las autoridades es el incremento de las altas médicas entre los diagnosticados, que ya son 34.219.

En cuanto a los contagios el repunte fue de un 6 por ciento, incremento porcentual diario más bajo desde que entró en vigor el estado de alarma y el confinamiento obligatorio de la población, el 14 de marzo.

Con estas cifras sobre la mesa, el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, se dispone a anunciar una segunda prórroga de 15 días del estado de alarma, lo que llevará a que la sociedad española permanezca aislada hasta el 26 de abril.

El objetivo principal del confinamiento es contener los contagios para evitar el colapso del sistema sanitario, especialmente en los lugares donde se produjeron los brotes más amplios, empezando por la Comunidad de Madrid, que concentra la mitad de los infectados, y siguiendo por Cataluña.

No obstante, los datos del Ministerio de Sanidad muestran que la presión en las UCI de los hospitales de la Comunidad de Madrid y Cataluña está bajando, aunque los profesionales sanitarios continúan trabajando al límite en términos de recursos humanos y materiales.

Por otro lado, hay malas noticias para los amantes del fútbol, ya que el experto en epidemias de referencia del gobierno catalán, Oriol Mitjà, aseguró hoy que en declaraciones radiales que "no volvería a abrir el estadio Camp Nou" hasta el otoño, arrojando agua fría sobre las pretensiones de los directivos del FC Barcelona, referente del fútbol mundial, de volver a jugar esta temporada.