El problema de la tierra no es solo de los pobres. Los sectores sociales más acomodados también son protagonistas del problema de la subdeclaración fiscal de la tierra que poseen en countries, barrios cerrados y clubes de campo. Es uno de los aspectos abordados por David Cufré en este artículo. Asimismo, Mario Wainfeld analizó el crecimiento de las violencias en pandemia y las tomas de tierras y Juan Grabois dio su opinión en una columna publicada en este diario. 

El debate está planteado y las y los soci@s dejaron sus opiniones, acá las más destacadas: 

Felicito a Página/12 por la inclusión de Grabois en sus columnas y espero que se haga permanente para mostrar también este sector del Frente de Todos que es imprescindible si queremos que no vuelva el neoliberalismo. La nota ofrece una explicación contundente de las "tomas" de los pobres desde el punto de vista de los pobres. También están las "tomas" de los ricos que destruyen ecosistemas, reproducen negocios inmobiliarios deteriorando espacio público, matan a tribus y a criollos y desplazan gente a tiros, queman bosques, niegan el acceso a ríos y lagos, "toman" el aire (a pesar de que todavía no se lo privatizó), fumigando sobre poblados y escuelas, etc. etc. Las tomas de los ricos no perjudican a un barrio sino al conjunto de la sociedad, pero en su trámite la justicia las legaliza o las disimula. Esas "tomas" nunca son ilegales. Para eso está hecho el sistema. Si se considera la historia argentina de los últimos doscientos años sólo estamos viendo ahora las consecuencias de la concentración de la tierra, de la destrucción de la economía y el hábitat de las provincias interiores, la concentración de riqueza en el litoral exportador y el flujo de pobres hacia sus cinturones periurbanos. Era inevitable que esto sucediera en el régimen que prevalece. Para las contribuciones que critican el artículo, es indispensable que lean el "plan San Martín" para que vean cómo se puede solucionar el problema de la tierra, el techo y el trabajo (no está basado en la dádiva clientelar).
edu17

Coincido que la toma es un drama social que debe resolver ya el gobierno porque la pandemia y el hacinamiento perjudica a los que no tienen espacio. Y eso son los pobres. Está claro que lo esencial es invisible a los ojos: no se ve el drama. Se ve la ocupación. Algunos toman tierras por desesperación y otros toman deuda para comprar dólares, fugarlos y dejar al Estado debilitado. Critica: Grabois debe saber que la derecha tiene recursos y tiene los fierros. Y el gobierno pone todo el cash en camas, respiradores, y todo lo referente al Covid. Que critique. Pero que siga y no rompa con el frente. Divididos ganan ellos.
maxicitera

Todos los que acá defienden con vehemencia las tomas quisiera verlos en la situación: que gente humilde les tome sus casas o departamentos a ver si siguen pensando lo mismo. Hay que ser coherentes. Quizás la solución sea que el Estado baje sueldos siderales en algunos sectores privilegiados que ni siquiera pagan ganancias como en la Justicia y con esa plata ayudar con créditos muy blandos a que tengan su vivienda o directamente construírselas en tierras fiscales a gente carenciada. O cobrar impuestos a la tierra improductiva , pero nunca consentir la violencia o la clandestinidad como modo de adquirir el dominio. Porque así se avalaría que esta gente que hoy ocupa sean desplazados mañana por otros grupos más fuertes y volveríamos a la ley del más fuerte, a la Edad Media. 
solomon

Si queremos resolver el problema de la vivienda, el mejor ejemplo global de cómo lograrlo está en Singapur. En Singapur, más del 80% de la población vive en viviendas construidas por el Estado. El programa tiene como prioridad la construcción de viviendas, no el financiamiento de préstamos, porque lo segundo sin lo primero sólo causa que los precios se disparen. Las viviendas públicas tienen restricciones que limitan la especulación, una misma familia no puede tener dos, y no la puede vender o rentar por al menos 5 años, y en esos 5 años deben habitarla permanentemente. La re-venta de vivienda también está controlada, y sólo podés vender la vivienda pública que adquiriste a otro ciudadano o residente permanente singapuriense que no tenga una. Además, la propiedad sobre la vivienda pública es en realidad un título sobre un contrato con duración de 99 años, para poder garantizar que el espacio esté disponible en el largo plazo para construir viviendas de acuerdo a las necesidades del futuro. Además, el gobierno tiene subsidios y programas que promueven que los jóvenes puedan comprar antes de rentar, que los adultos mayores se muden a espacios más pequeños y otros para promover que los hijos vivan cerca de sus padres. El gobierno también tiene ocupaciones mínimas por etnicidad, para evitar que se formen ghettos y que haya tensión racial (la población es extremadamente diversa), la idea es que los hijos de todos (chinos, malasios o hindús) vayan a las mismas escuelas, jueguen en los mismos parques, etc. (Al punto de que en Singapur la lengua más usada es el inglés, a pesar de que no era la lengua materna de casi nadie cuando se independizó de los ingleses, pero consideraron que seleccionar el chino, por ejemplo, pondría en desventaja a los malasios y los hindús). Cada desarrollo habitacional tiene escuelas, tiendas, servicios médicos y acceso al transporte público. El acceso a la vivienda, además, es un recurso estratégico primordial para asegurarse de que las inversiones enormes que hace el Estado en educación no terminen siendo aprovechadas por otros países. Argentina (y el mundo subdesarrollado en general) tiene un problema sistémico en el que la gente más calificada se va, y la educación en estos países en un grado muy alto termina siendo un subsidio para la producción en el primer mundo. En Singapur, el acceso a una vivienda propia desde la juventud también se utiliza para combatir esto, al tener vivienda propia, es mucho menos probable que se muden al exterior. El gobierno de Singapur (que es calificado por un montón de sitios de propaganda de derecha, como la Heritage Foundation, como el lugar más capitalista del mundo) es dueño del 70% de la tierra en el país, y la fue adquiriendo poco a poco desde su independencia (cuando se independizó era dueño de menos del 20%). La vivienda no debe ser tratada como una cuestión que será resuelta por el mercado, por el simple hecho de que el mercado de tierras es fundamentalmente rentista.
luisaugustofretes

Importante esta nota también, Cufré, como la de Grabois, y todavía se quedan cortos. Para tener la legitimidad de decir que las tomas son ilegales, lo primero que hay que hacer es recuperar el Lago Escondido para todxs lxs argentinxs, usurpado y apropiado por un magnate extranjero que vaya a saber a quién representa, a pesar inclusive de un fallo de la CSJN. Otro tema, mapuches, por ejemplo. Estaba yo un día en un bucólico pueblito de la Patagonia magnífica que tenemos, El Maitén, y me acerqué a la orilla, comentando con la familia sobre lo lindo que sería cruzarlo y explorar del otro lado. Pero resulta que la otra orilla estaba alambrada hasta el agua, y el dueño de la pensión donde nos alojábamos nos dijo: "ni se les ocurra acercarse, que es de Benetton y los sacan a tiros, está todo vigilado por gente armada". Otro billonario extranjero que usurpa toda una orilla de un río (que es público, de todxs), cosa ilegal si las hay. Pero en cambio está bien correr a tiros e inclusive matar a lxs integrantes de pueblos originarios y a quienes con y por ellos luchan. Lo mismo que el tema deuda con los "bonistas" y deuda con el FMI, todo fugado por el gobierno anterior, apropiado ilegalmente y cargado sobre la espalda de lxs argentinxs excepto las élites, y que en vez de investigarse y denunciarse por ilegal (especialmente la del FMI), se termina "blanqueando" con "exitosas negociaciones". Créanme que conozco la magnitud de los poderes en danza, pero hay que tener coherencia. Sería por lo menos un principio escuchar a lxs funcionarixs de este gobierno llamar a las cosas por su nombre, hablar de estas superusurpaciones cuando se les reclama por los pedacitos de tierra ocupados por lxs desterradxs, recuperar esos bienes públicos esenciales (ríos, lagos), actuar conforme el compromiso tomado con el electorado que lxs colocó en la conducción de nuestro país para hacer lo que prometieron. En caso de que la oposición a todo quisiera montarse sobre este debate en el FdT alegando conflictos y/o internas en el Frente, cabe aclarar que estas opiniones son memos, recordatorios, participación, y no lo que ellxs quisieran.
Pepitalapistolera

¡Sumate a la conversación!

Si todavía no sos soci@, podés hacerlo desde acá