El paro de ayer de los recibidores de granos en 16 puertos del país, entre ellos los del cordón industrial de la provincia, tuvo un “alto acatamiento”. El secretario general del gremio URGARA, Pablo Palacio, dijo que la medida refleja el “apoyo” a las demandas de los trabajadores del sector y reveló que hoy, a las 15, asistirá a la convocatoria del Ministerio de Trabajo de la Nación para “buscar respuestas a los pedidos y solucionar las necesidades” de sus compañeros. “No vamos a renunciar a nuestro reclamo de mejoras en el poder adquisitivo e insistiremos en la reducción de la jornada laboral, que es algo que venimos pidiendo hace ya mucho tiempo a un sector que hoy está en un año récord de exportaciones y puede dar respuestas para que haya empleo para todos”, planteó.

URGARA reanudó ayer su plan de lucha al término de la conciliación obligatoria que había dictado el Ministerio de Trabajo el 27 de agosto. Y respondió punto por punto el planteo de la Cámara de Puertos Privados Comerciales (CPPC), a la que calificó como un libelo de “agravios y adjetivaciones sobre la medida de fuerza, pero sin presentar una discusión de fondo sobre la protesta”.

“Los empresarios utilizan la excusa del ingreso de dólares de manera infantil, buscando distraer la atención de los argentinos, y con una actitud temeraria e irresponsable culpan a los trabajadores por los costos económicos del paro, dejando en claro su ambición y avidez de rentabilidad en desmedro de los intereses de nuestro país. El continuo retraso para la liquidación de divisas muestra una grave insensibilidad frente a la cual el gobierno nacional debería tomar cartas en el asunto para que se termine la especulación empresaria en base a mentiras que crean incertidumbre económica y confusión”, denunció URGARA.

El poder adquisitivo de los trabajadores cayó por la “inflación”. “Los sueldos están lejos de representar el verdadero valor que aportan los obreros portuarios a la economía de nuestro país y a los bolsillos de los empresarios”, sintetizó el gremio.