Desde Santa Fe

“Imposible”, fue ayer la palabra que más utilizó la ministra de Educación, Adriana Cantero, para descartar la vuelta a las aulas en la provincia. “Santa Fe no está en condiciones de reiniciar las clases con modalidad presencial –dijo- por la alta curva de contagios y la sobreexigencia a la que está sometido su sistema de salud". Es la misma alerta que anunció el martes el gobernador Omar Perotti cuando pidió a los santafesinos “comprensión y el aporte” para evitar el “stress del sistema sanitario” y el colapso de las camas críticas. Cantero aportó su síntesis: si el nivel de contagios por covid “explotó” en Santa Fe en el mes de setiembre, “es imposible” que en octubre “tengamos un dispositivo que movilice más a la población y pongamos en riesgo la vida, la salud y nuestro propio sistema sanitario”. El problema entonces no es la vuelta a clases, es el covid y los hospitales y terapias intensivas al borde del colapso. “Lo más importante es cuidar la vida”, insistió.

Cantero participó ayer en una reunión de ministros de Educación que convocó el titular de la cartera nacional Nicolás Trotta. En los títulos de la previa se especuló con un supuesto “regreso progresivo” a las aulas, pero la ministra lo descartó de plano en la provincia. “Hoy, Santa Fe no está en condiciones de reiniciar las clases con modalidad presencial. La curva de contagios está muy alta y el sistema de salud muy sobreexigido, al borde del stress. Eso hace imposible, según la autoridad sanitaria, que tengamos un dispositivo que movilice más a la población y pongamos en riesgo la vida, la salud y nuestro propio sistema sanitario”.

La única alternativa, pero que recién analizará esta semana con su colega, la ministra de Salud Sonia Martorano, es un regreso paulatino a las aulas en las escuelas rurales del centro norte. Martorano y su secretario de Salud, Jorge Prietto, fueron dos de los que dieron positivos en la Casa Gris en setiembre, cuando “explotó” el nivel de contagios en la provincia, según la definición de Cantero.

“Lo que analizamos en Santa Fe –explicó- es que tal vez en la segunda quincena de octubre” puedan haber clases presenciales “en las escuelas rurales que no tuvieron impacto de covid”. Y ahí se pueda utilizar el “dispositivo” como llamó al protocolo para la vuelta a las aulas, que “aplazamos en setiembre porque fue el mes en que Santa Fe explotó en términos de los contagios”.

“Esta semana vamos a reunirnos con la ministra de Salud para analizar, con un mapa sobre la mesa, escuela por escuela, localidad por localidad, del centro norte de la provincia, las escuelas rurales, aisladas en pequeñas comunidades, donde no ha impactado el covid y tenemos serias dificultades para sostener el vínculo pedagógico” porque tampoco tienen acceso a internet. “Esa sería nuestra prioridad en este momento de pandemia en el que estamos en Santa Fe”.

En la reunión de ayer con Trotta, “lo que analizamos fueron los distintos protocolos. Los más interesados en la vuelta a clases presenciales somos los ministros de Educación, pero eso es una decisión que depende de la curva de contagios. Analizamos tres protocolos que nos faltaban del nivel inicial, educación técnica y formación docente. Y seguimos hablando de los dispositivos que contemplen los grupos prioritarios, los cursos finales de cada nivel: séptimo grado de la primaria, quinto de la secundaria y sexto de la técnica. Y en el caso de Santa Fe, pensamos en alternativas de primer grado”.

La ministra de Educación dijo que si las primeras que darían clases son las escuelas rurales, esa posibilidad está muy lejos en Santa Fe, Rosario y en los departamentos del sur por el alto nivel de contagios. “No podemos poner en riesgo la salud de la gente y un sistema sanitario que está sobreexigido”. “Si se vuelve a la presencialidad en las escuelas, se habilitaría una gran movilidad social como el transporte público, padres que acompañan. Es decir, la situación sería más compleja", concluyó.