Hacía 11 años que el colombiano-estadounidense Juan González no venía a Buenos Aires. Su anterior visita había sido como jefe de gabinete del entonces subsecretario del Departamento de Estado para América Latina, Arturo Valenzuela. Su regreso a la capital argentina, en el pico de la pandemia, como director principal del Consejo Nacional de Seguridad para el Hemisferio Occidental marca un movimiento pragmático de la administración Biden, en los papeles, más cercana a la oposición de derecha argentina. González conversó con un grupo reducido de medios, entre ellos Página12, en la embajada de EE.UU., antes de partir hacia Uruguay.  

El enviado de Biden trazó una diferencia entre el Fondo Monetario Internacional de comienzos de siglo y el actual, que encuentra, una vez más, a la Argentina como uno de sus principales contrapartes. El organismo no puede ser el mismo que en 2002, "porque el mundo vive una de las peores pandemias de la historia y la peor crisis económica en cien años", dijo en alusión a las negociaciones por su enorme deuda. 

Tal definición está en línea con los ejes del discurso del ministro de Economía, Martín Guzmán, o el del propio Presidente Alberto Fernández, con quien González compartió  el martes un almuerzo virtual. El funcionario -uno de los dos principales del gobierno estadounidense para la región- también mantuvo reuniones con el canciller, Felipe Solá, el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, y el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa. 

Entre gestos de aproximación, González tomó distancia: "Nuestro interés es que Argentina prospere en las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional, pero es Argentina quien determina dónde terminan". El funcionario estuvo acompañado de Julie Chung, subsecretaria interina para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado.

González ocupa el cargo que durante la presidencia de Donald Trump desempeñó el agresivo halcón Mauricio Claver-Carone, hoy al frente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), un ferviente partidario de Mauricio Macri. Para el enviado especial de Biden, "lo que está pasando con el FMI manda una señal a la región, porque no es sólo Argentina el país que sufre económicamente, todos están en crisis de deuda seria", sostuvo en referencia a la negociación de plazos y tasas que lleva adelante Guzmán con el organismo dirigido por Kristalina Georgieva. 

Vacunas

Es sabido que el gobierno de Fernández le planteó claramente a EE.UU. que facilite la provisión de vacunas, en especial las dosis de AstraZeneca que fueron fabricadas en la Argentina y que necesitan de insumos provenientes del Norte. A González se le preguntó si el excedente de dosis podría exportarse a la Argentina.

El encargado del Consejo de Seguridad para la región anticipó un plan general no sólo para Argentina. "Como dijo el secretario de Estado (Anthony) Blinken, seremos líder global. Latinoamérica es prioridad alta, dados los casos y porque son nuestros vecinos. Aplaudimos los esfuerzos de México y Argentina de buscar formas de producir las vacunas en la región y buscamos formas de poder apoyarlos. No puedo decir qué vamos a anunciar y cómo. (Será) lo antes posible. No queremos replicar el mercantilismo de vacunas de Rusia y China, sino que queremos basarnos en las necedades de salud".

González es oriundo de la ciudad colombiana de Cartagena. Antes de viajar a Buenos Aires, estuvo en su país. Ante la pregunta de por qué en su viaje no incluyó la visita a Brasil, el funcionario adujo complicación de conexiones aéreas por la pandemia. Esa respuesta generó un poco de suspicacia: el presidente Jair Bolsonaro es un férreo admirador de Trump y, con el cambio de signo en Washington y la deriva ultra del brasileño, el eje con Brasilia parece haber quedado bastante relegado.

- Usted señaló que con el gobierno argentino habló sobre Venezuela. Da la sensación de que al gobierno de Biden le preocupan los derechos humanos en ese país, pero no mide con la misma vara cuando es un "aliado estratégico". En plena pandemia en 2020, fueron asesinados 310 líderes sociales en Colombia. Usted que estuvo allí, ¿manifestó esa preocupación?

- El tema de los derechos humanos no es relativo a ninguna parte. Las conversaciones con el presidente (Iván) Duque abarcaron este tema. Los dos estuvimos de acuerdo en que la muerte de un sólo defensor de derechos humanos es demasiado. Él manifestó el compromiso de hacer todo lo posible para defender a los activistas sociales y nosotros veremos cómo podemos apoyar esos esfuerzos. Apoyamos a Colombia para combatir la inseguridad doméstica, pero se debe hacer bajo un rubro de derechos humanos que no es relativo, es absoluto. Eso aplica para Venezuela también, el régimen de Maduro no deja entrar a organizaciones humanitarias a dar asistencia porque él las quiere controlar". 

Tras cartón, González se concentró nuevamente en Venezuela y citó las denuncias sobre ese país registradas en el informe Bachelet. 

El "mercantilismo de China y Rusia"

En relación a la adquisición por parte de Argentina de la vacuna Sputnik V, el enviado estadounidense fue fuertemente crítico de Rusia y también incluyó al gobierno chino. "La prioridad es vacunar a las poblaciones, no vamos a culpar al gobierno argentino por conseguir dosis para su población. Nosotros vamos a ser un líder global en respuesta a la pandemia. No lo haremos a cambio de acuerdos políticos, sino para que Argentina y otros países se recuperen. Es más que vacunas: es la cadena de suministro, la coordinación de información necesaria entre nuestros científicos. Se necesita desarrollar vacunas para niños. El mercantilismo de las vacunas de Rusia y China es para ellos una iniciativa para avanzar con su influencia. Pero es muy poco, porque no están organizando una respuesta global en la lucha contra la pandemia".

En esa línea, González respondió sobre qué le preocupa a la administración Biden de la relación entre nuestro país y China. "Argentina es un país soberano que decide qué está en su interés nacional. La conversación con Argentina sobre China es parte de un contexto global que tenemos que entender. Tenemos preocupaciones sobre iniciativas chinas que a veces no son consistentes con normas y valores que compartimos como aliados globales. Ejemplo, la falta de transparencia en las actividades económicas y las normas en las inversiones". 

Con  todo, González manifestó su preocupación por el gigante de las tecnologías en telecomunicaciones Huawei, que en los últimos años viene dando pelea en la vanguardia del mercado en todo el mundo. "Más que una compañía, tiene afiliación con el gobierno chino y la expansión de la empresa en la región tiene implicaciones en términos de inteligencia y de presión que puede utilizar China. Cuando hablamos de Huawei, es manifestar la necesidad de que haya ciertos estándares de transparencia".

Huawei, que opera en la Argentina, fue un blanco central de Trump. En ese punto, parece no haber diferencias.