Familiares y vecinxs de Gladys Paz, la policía asesinada el pasado jueves en Rosario de la Frontera, se manifestaron el lunes ante la sede del 911, la fiscalía, la comisaría 31 y la casa del intendente, exigiendo la localización y la aprehensión del presunto femicida, Nicolas García, también miembro de la fuerza policial.

Señalaron que García se mantiene en línea en whatsapp y pese al uso de dispositivos móviles, las fuerzas de seguridad todavía no lo localizan. En la mañana de ayer la familia fue recibida por el fiscal Nicolás Rodríguez, que actúa en la causa por licencia del titular.

Mediante mensajes de whatsapp, García se habría comunicado el domingo con una prima de la víctima, a la que le dice "no sé que me pasó. La amé tanto a mi gringa Estefy (...) ahora me voy con ella a estar a su lado. No puedo vivir sin ella. Cuidalo a ...(el hijo en común con la víctima) Soy una bestia". El jefe de la subcomisaría de El Mirador, quien quedó el fin de semana a cargo también de las otras dos comisarías de Rosario de la Frontera, Carlos Alarcón, aseguró a medios locales que no pueden localizar el dispositivo, ni las coordenadas de IP de los aparatos desde los cuales se conecta García. 

El Ministerio Público Fiscal informó a Salta/12 que hasta la noche del martes el policía prófugo no había sido hallado aún. Además, informaron que Rodríguez recibió a familiares de Paz a los que puso en conocimiento de las actuaciones que se llevan a cabo y de los derechos que les asisten como víctimas. Allí acordaron mantener una nueva reunión en el transcurso de la semana.

 “Exigimos justicia, no puede ser que no lo puedan atrapar” dijo el padre de la víctima en el programa radial de Agenda Salta, “Pan y Circo”. Manifestó sus sospechas de que García está siendo ayudado por otras personas porque "anda sin plata, no tiene nada y pasaron varios días sin novedades”. El padre manifestó su sorpresa respecto a que las autoridades no puedan atrapar a García, quien huyó de la escena del crimen en la motocicleta cilindrada 110 Marca Corven, azul francia, que era de la víctima. 

El periodista de Rosario de la Frontera, Miguel Padilla, señaló a Salta/12 que de las autoridades policiales "no hay explicación sobre por qué no lo localizan" a García. Precisó que desde la mañana del martes, está interviniendo la Interpol en la búsqueda. También actúa Gendarmería y la Policía provincial. Esta última sospechada por la familia y vecinos de las Antillas de donde era oriunda la víctima, de estar cubriendo al presunto femicida. 

Padilla contó que el subcomisario Alarcón acompañó la marcha del lunes y recibió a  familiares de la víctima en la comisaría 31, pese a los reclamos a la fuerza policial en la manifestación. Indicó que Alarcón manifestó que conocía a la víctima porque había trabajado con ella en la subcomisaría de El Mirador y expresó su conmoción. 

Familiares y vecinxs que se trasladaron desde Antillas hasta Rosario de la Frontera, se expresaron "ofuscados, dolidos, enojados y con rabia", describió Padilla durante la marcha del lunes. Esa movilización terminó cuando se dirigieron a la casa del intendente Gustavo Solís,  y le golpearon la puerta "no fue la familia, sino los vecinos" aseguró Padilla.

En un primer momento se había difundido que el presunto femicida había escapado con el hijo de 2 años que tiene en común con la víctima, huérfano de madre tras el femicidio, luego se supo que el niño está con sus abuelxs maternxs.

García huyó vistiendo un pantalón deportivo color oscuro (azul o negro), campera negra tipo rompevientos, con un casco negro con letras blancas en los laterales con visor polarizados y zapatillas blancas con franjas negras en sus laterales.