El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) dispuso afianzar en la frontera norte de Salta, Jujuy, Chaco y Formosa el refuerzo de la vigilancia epidemiológica para prevenir el ingreso al país de la influenza aviar (IA) a raíz de la detección de la enfermedad en el departamento Cochabamba, en el centro del vecino Estado Plurinacional de Bolivia.

El Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) del vecino país declaró este fin de semana la emergencia sanitaria en el departamento Cochabamba tras la detección de alta mortalidad en aves de postura y aves de traspatio (más conocido como gallinero). La medida se adoptó mientras se esperan los resultados confirmatorios de laboratorio de los análisis a las muestras tomadas de los animales afectados.

“Queremos transmitir tranquilidad a la comunidad”, dijo a Salta/12 el médico veterinario Raúl Díaz Pardo, quien es coordinador temático de Sanidad Animal del Centro Regional Noa Norte del Senasa. “No hay contagio por comer carne de pollo o huevo”, indicó el funcionario al aclarar que la única manera de contraer la enfermedad es al tocar al animal infectado vivo o muerto.

Añadió que el virus se detectó primero en el norte del continente, en Estados Unidos, el año pasado, y fue bajando por períodos hasta llegar ahora a Bolivia. 

Asimismo, explicó que el virus suele ser transportado en estas distancias por las aves acuáticas silvestres, como los pelícanos, que se presume son los que fueron trasladando el virus desde el norte del continente.

Al ser consultado por el peligro que podrían representar las aves que están en contacto más cercano con poblaciones urbanas, como las palomas, Díaz aseguró que por el momento nunca se detectó el virus de la gripe aviar en esta u otra especie cuyo hábitat es más cercano a la concentración humana.

Detalló que la producción aviar en Salta es considerable y se concentra en la zona del Valle de Lerma, algunos municipios del sur provincial y el departamento San Martín.

Entre las medidas adoptadas por las autoridades del Senasa como parte de las acciones impulsadas en el marco del alerta preventivo que rige en el país, figuran la movilización de agentes especializados de su Dirección Nacional de Sanidad Animal y de otras regiones hacia las oficinas ubicadas en la frontera con Bolivia en las provincias de Salta y Jujuy; seguir sensibilizando -a través de información directa a la población y al sector productivo- sobre la importancia de denunciar el hallazgo de aves con sintomatología y muertas (ya sean de producción, de traspatio o silvestres), reforzar la bioseguridad en granjas comerciales, y continuar trabajando junto a otros entes públicos en la vigilancia y en el control del movimiento de aves, productos y subproductos de aves.

Medidas

Ante los casos de Influenza Aviar (IA) registrados en América del Norte y debido a la ruta migratoria de aves silvestres hacia el sur, el Senasa dispuso el alerta sanitario en diciembre de 2022, dado que hasta ahora el país es reconocido como libre de esta afección animal. Se informó que también se afianzaron los vínculos y el trabajo conjunto con Parques Nacionales y la Dirección de Fauna Silvestre para la vigilancia permanente en aves silvestres.

La información oficial indica que “en Jujuy se recibieron dos notificaciones por hallazgos de aves muertas en Laguna de los Pozuelos, que posteriores análisis de laboratorio descartaron que se tratara de IA”.

La difusión pública sobre la importancia de notificar sospechas sobre la enfermedad ha permitido un aumento de la cantidad de análisis de muestras de aves recibidas en el Laboratorio Nacional del organismo. Todas ellas, hasta el momento, han arrojado resultados negativos a la presencia de IA.

La enfermedad

La influenza aviar altamente patógena (IAAP) afecta a las aves, tanto de corral como silvestres. Las aves acuáticas y playeras se consideran los reservorios naturales de estos virus y no suelen enfermarse, aunque esto parece estar cambiando ya que se han detectado mortandades de estas especies relacionadas a la presencia del virus H5N1, que es la variante del virus de alta patogenicidad de la influenza aviar.

Para su detección precoz, se requiere de la notificación ante el Senasa de cualquiera de los siguientes síntomas clínicos: mortandad principalmente en aves migratorias, marinas y rapaces. Aves con depresión, o que presenten incoordinación, temblores, problemas respiratorios, diarrea y edema facial, todo en caso de aves silvestres.

En las aves de corral los síntomas detectables son: elevada mortandad; sintomatología respiratoria: tos, jadeo, secreción nasal. Sintomatología neurológica: temblores, movimientos circulares, tortícolis, reducción en la producción de huevos superior al 5% durante más de dos días. Reducción en ingesta de alimento y agua superior al 20 por ciento.

Ante la detección de signos clínicos nerviosos, respiratorios, digestivos, disminución en la producción de huevos, en el consumo de agua o alimento o el hallazgo de aves domésticas o silvestres muertas, cualquier persona puede notificar al Senasa, personalmente o por teléfono; también a través de la app “Notificaciones Senasa”, disponible en Play Store; o enviando un correo a [email protected] y, en el apartado “Avisá al Senasa” de la página web.