"Lo que se chequeó es que efectivamente no se hizo nada", dijo el abogado Julio Chávez quien junto a Pedro Arancibia, representan a vecinos de los barrios aledaños del Río Arenales. Los dichos fueron tras una inspección ocular hecha en el marco del amparo presentado tras las inundaciones de 2011.

Luego de la renuncia del ex juez (hoy devenido en ministro de Seguridad), Marcelo Domínguez, la jueza de Minas, María Victoria Mossman, quedó a cargo de la causa y ordenó una inspección ocular que se concretó el jueves pasado.

Al observar el avance de la contaminación y sedimentos sobre el lecho del río que atraviesa toda la ciudad, Mossman dispuso que en una semana las partes demandadas, entre las que se encuentran el gobierno de la provincia, la Municipalidad de Salta, y Aguas del Norte, "presenten un plan de abordaje urgente respecto del despeje del cauce del río Arenales en el área localizada previo al cruce del puente de la calle Tavella, y también la realización de defensas sobre el margen izquierdo del río para evitar inundaciones".

Chávez advirtió que si bien en algún momento se hicieron algunos trabajos sobre el lecho del río, nunca hubo mantenimiento. Esto generó que persistan, o incluso empeoren, las condiciones por las cuales los vecinos iniciaron el recurso de amparo tras las inundaciones ocurridas en 2011, cuando sus viviendas fueron cubiertas por el agua.

Distintos estudios confirmaron que las aguas del río se encuentran contaminadas, incluso por la existencia de líquidos cloacales.

"Los vecinos denunciaron que por las noches hay camiones de Aguas del Norte que vuelcan los líquidos cloacales directo al río", dijo Chávez al referir a esta situación. Afirmó que los denunciantes aseguraron tener imágenes que prueban lo denunciado. El abogado dijo que en cuanto tengan las imágenes las aportarán como prueba ante la Justicia.

Chávez afirmó que, entre otras justificaciones, los funcionarios de Aguas del Norte sostuvieron que hay un ducto que pasa por medio del lecho del río que en épocas estivales, ante la presencia de lluvias, se satura y derrama los líquidos cloacales.

Al ser consultado, el gerente general de Aguas del Norte, Julio Bazán, dijo a Salta/12 que no estuvo en la inspección del jueves, pero tampoco le llegó denuncia alguna sobre el vuelco directo de líquidos cloacales. Sin embargo, reconoció que las filtraciones de lluvia terminan generando el desborde de los líquidos cloacales sobre el río.

La Unidad que nunca se creó

"La provincia presentó documentos desarticulados. Nunca un plan integral o de mínima", dijo Chávez. Sostuvo que en una de las audiencias se reclamó al Ejecutivo la orden sobre la creación de una Unidad Ejecutora que trabaje para erradicar la contaminación del río. Pero "nunca se creó y la respuesta de la provincia fue que era imposible coordinar tantos organismos en una sola Unidad".

Mientras, ya existe una sentencia que nunca se cumplió, además de denuncias penales en curso y pedido de sanciones económicas a los funcionarios responsables.