“A Santiago se lo llevó Gendarmería, tenía puesta la campera celeste que yo le había prestado, vi cómo lo golpearon y lo metieron en una camioneta que salió rumbo a Esquel”, dijo Matías Santana ante la Justicia y lo repitió a los cronistas en la puerta de los tribunales de Esquel. “Si existía un miedo ya se rompió”, agregó en alusión a su anterior declaración bajo reserva de identidad. Además de Santana, entre ayer y hoy declararon Soraya Maicoño y Noemí Garay, las dos mujeres que salieron de la Lof para denunciar la represión pero fueron detenidas durante seis horas en la ruta, y vieron a Maldonado en la casilla de guardia. Y también lo hizo L.T, la testigo más importante porque fue quien llevó a Maldonado a la Pu Lof el día anterior. Además, por estas horas la justicia estaría analizando un supuesto informe de inteligencia con los gendarmes que habrían perpetrado la desaparición del joven tatuador.

Una fuente consultada por Página12 que presenció las audiencias destacó que los testimonios fueron muy precisos y persuasivos, a pesar de que los declarantes expresaron su dolor por la ausencia de Santiago y hubo que superar “aspectos culturales” para que estuvieran en condiciones de hablar ante la justicia.

Dijo ante el juez Matías Santana: