La Policía porteña golpeó y arrestó violentamente a Mariana Gómez, de 24 años, en la estación Constitución de la línea C de subte. Fue por besar a su esposa, Rocío Girat, protagonista de una emblemática denuncia por los abusos de su padre, el ex suboficial de la Armada Marcelo Girat, condenado a 14 años de prisión. Los agentes comenzaron con intimidaciones contra las jóvenes, trataron de “pibe” a Gómez y luego la golpearon y la detuvieron con la excusa de que se encontraba fumando un cigarrillo en un lugar no autorizado. “Mariana se encontraba junto con su esposa en la estación de Constitución en Capital Federal besándose cuando fue interceptada por personal policial de la Policía de la Ciudad que bajo la excusa de que se encontraba fumando un cigarrillo (de tabaco e industrial) en un sector no autorizado la golpeó y la detuvo, en un claro ataque por su orientación sexual”, denunció la Agrupación LGBTI 1969. Gómez se encuentra detenida en la comisaría de la estación Boedo del subte E. Colectivos feministas y por la diversidad convocaron a manifestarse a ese lugar y pasadas las 21 lograron que se ordene la liberación de la joven.