La Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) detectó más de 120 mil metros cuadrados no declarados en el municipio de General Pueyrredón. Son propiedades en countries y edificios donde sus dueños pagaban el impuesto inmobiliario como si fueran terrenos baldíos. Estos resultados se obtuvieron mediante un trabajo de "inteligencia fiscal" basado en cruzar información con otros organismos y el uso de imágenes satelitales que muestran el avance en las construcciones en la provincia. El caso más relevante es el de una torre en Playa Chica, en Mar del Plata, que ahora aportará 182 millones de pesos anuales para disposición de los bonaerenses.

Cristian Girard, al frente del organismo, explicó en su cuenta de la red X que los metros cuadrados que no estaban registrados y evadían el debido monto del impuesto inmobiliario, corresponden a 57 edificios en altura, algunos con departamentos residenciales, otros con oficinas y cocheras y 113 casas “con y sin pileta pertenecientes a urbanizaciones cerradas con un valor de mercado entre U$S 400.000 y U$S 800.000”.

En épocas donde la recaudación mantiene una tendencia en baja, desde ARBA informaron a Buenos Aires/12 que ya no se realizan los tradicionales operativos de verano de fiscalización y hubo un cambio de estrategia. “La gestión decidió reorientar el esfuerzo de fiscalización hacia sectores de mayor capacidad contributiva”, señalaron ante las consultas de este medio.

Si bien remarcaron que no se puede afirmar que estos sectores son los que más evaden, las acciones que se programaron para todo el año tienen un eje: la justicia tributaria. Se trata, detallaron, de apuntar al universo que no sólo tiene mayor capacidad para cumplir con sus impuestos, sino que “son los que usan ingeniería contable y jurídica para eludir su posición ante el fisco”.

En relación a las técnicas que posibilitaron dar con estas propiedades cuyas declaraciones no reflejaban la totalidad de los metros cuadrados construidos, Gaspar Spiritoso, subdirector de Acciones Territoriales y Servicios de ARBA explicó que debió a un “intenso trabajo de inteligencia fiscal”.

“Hay un área específica que se ocupa de generar casos de fiscalización por medio de diferentes fuentes de información como las facturaciones, el entrecruzamiento de datos con la AFIP o con centrales de riesgo, para así conformar perfiles de los contribuyentes”, señalaron desde la Agencia que conduce Girard.

Otro caudal de información se consigue a través de “imágenes satelitales del territorio de la provincia de Buenos Aires que muestran la evolución de la construcción y también se pone en funcionamiento drones para detectar construcciones no declaradas”.

Todo este conjunto de labores está direccionado, según el propio Girard, a “combatir la evasión fiscal y recuperar recursos que son indispensables para sostener los servicios que brinda el Estado bonaerense”. De esta manera, apunta el titular del ARBA, se aporta al sostenimiento el modelo provincial de “financiar las políticas sociales, en este momento de dificultades provocadas por el ajuste del gobierno nacional”.

¿Qué se descubrió en Mar del Plata?

Dentro de los 57 edificios en altura que mencionó Girard, se destacó una torre de 14.000 metros cuadrados, que continuaba declarada por la empresa desarrolladora como un baldío. Esta construcción es parte de un importante complejo residencial ubicado frente al mar, que cuenta con departamentos que en el mercado se comercializan por encima de los 335 mil dólares, explicaron desde ARBA.

Spiritoso detalló que es la tercera vez que la Agencia detecta que el complejo constructor de la torre emplazado en la zona de Playa Chica actúa de esta manera. “En todos los casos, la empresa a cargo del proyecto solo declaró la construcción de los edificios cuando fue intimada por el organismo, lo que muestra claramente un comportamiento especulativo respecto de la cuestión tributaria”, indicó el funcionario.

Según comunicó ARBA, la primera torre se registró en 2017 a partir de un control catastral del organismo, y la segunda fue declarada en el verano de 2021 después de una intimación enviada por la agencia comandada por Girard. “Queremos que los desarrolladores paguen sus impuestos de forma justa y equitativa, como lo hacen la mayoría de las y los contribuyentes”, indicó Spiritoso, al tiempo que agregó que “estas maniobras de evasión son inadmisibles, sobre todo por la magnitud de los proyectos y la capacidad contributiva de las empresas”.

Con la incorporación de esta torre de departamentos, la partida inmobiliaria que le corresponde al complejo se incrementará en 182 millones de pesos. Además, como bien señaló el propio Spiritoso, las multas no se harán esperar y, en este caso, pueden ascender a 25 millones de pesos por no cumplir con los “deberes formales” que les corresponden a los contribuyentes.

Desde ARBA señalaron que cuando se da una detección de estas características el contribuyente tiene hasta quince días luego de la notificación que se hace “bajo puerta, en mano y a través del domicilio fiscal electrónico” para validarlo o rectificarlo. El trámite debe hacerse en la página web de la agencia. En el caso de que transcurra ese tiempo y no haya una rectificación, automáticamente se incorporar los metros cuadrados descubiertos al catastro de la propiedad.

Lo que se viene

A lo largo de la temporada el trabajo de ARBA seguirá vigente con la modalidad de focalizarse en los grandes contribuyentes, al igual que el resto del año. Este viernes se llevó a cabo un operativo en la frontera norte del municipio costero de Pinamar en conjunto con el Ministerio de Transporte y con la Policía de la provincia de Buenos Aires para controlar la deuda de los vehículos de alta gama. También incluyó acciones de control sobre viviendas declaradas dentro del municipio.

A los impuestos inmobiliarios y aquellos referidos a automotores, se le sumarán fiscalizaciones que ARBA tiene previstas para reducir la evasión de Ingresos Brutos en restaurantes y bares que ofrecen servicios a sectores de mayor poder económico sobre los cuales ya hubo un trabajo de investigación y hay indicios de presunta evasión.

En su balance de gestión de los primeros cuatro años, Girard remarcó que se detectaron más de 2.600 millones de pesos de evasión en restaurantes, bares y cervecerías de la provincia. De los 34.500 comercios del rubro que fueron registrados en ese tiempo "la mitad registra incumplimientos". 

Si bien IIBB es un impuesto que suele ser cuestionado, el propio titular de ARBA publicó días atrás que desde 2020 a la fecha se bajó la carga tributaria y administrativa a 3 mil PyMEs bonaerenses. "Es parte de la reforma integral de IIBB que llevamos adelante desde 2019", indicó el titular de ARBA. 

Los trabajos durante el inicio del 2024 también prevén operativos que apuntan a evaluar la situación de embarcaciones deportivas no registradas o cuyos dueños registran un alto nivel de deuda, lo que incrementaría la recaudación de impuestos patrimoniales.

Este año, además, comenzó con una noticia de renovación para la Agencia de Recaudación bonaerense que renovó íntegramente su página web y unificó en una sola línea de WhatsApp el canal de reclamos y trámites del organismo para hacer desde el teléfono celular. Ofrecerá diez opciones como puerta de entrada a la atención al contribuyente "de una manera simple, eficiente y ágil, que permitirá realizar consultas y reclamos, resolver gestiones y trámites, coordinar turnos de atención presencial, entre otras posibilidades".