Además de imponer las penas de prisión y multas económicas a los hermanos Ale y distintos integrantes de su Clan, en función de las responsabilidades que la Justicia consideró probadas en el funcionamiento de la banda, el veredicto contempló un apartado para los bienes materiales obtenidos a partir de las extorsiones, las usuras, la venta de estupefacientes y la explotación sexual de la prostitución ajena.

En el punto 18 de la sentencia, el Tribunal Oral Federal en lo Criminal ordenó el decomiso de bienes muebles e inmuebles, dinero y derechos patrimoniales de la Chancha Ale, Fabián González, Víctor Suárez, María Jesús Rivero, Valeria Bestán, Florencia Cuño y Julia Piccone por cuatro millones de pesos. En el caso de la Chancha, ese decomiso se suma a la multa por ocho millones y termina implicando la inhibición general de bienes. En el caso del Mono Ale, por su parte, la Justicia ordenó el decomiso de bienes muebles e inmuebles por cuatro millones de pesos, y la inhibición general de bienes por 12 millones.

Además, el fallo ordenó el decomiso de todas las armas secuestradas en los distintos allanamientos realizados en el marco de la causa, cuya investigación comenzó entre fines de 2012 y comienzos de 2013.

Los fundamentos de la sentencia se darán a conocer el 16 de marzo de 2018, porque el tribunal dispone de 40 días hábiles para leerlos. Una vez que sean públicos, las querellas y las defensas podrán presentar los recursos de Casación que consideren pertinentes.